La Fiscalía General del Estado se ha visto envuelta en una nueva controversia relacionada con los nombramientos de altos cargos en la Fiscalía. En esta ocasión, el foco se centra en la designación del fiscal de Sala de la Fiscalía Togada del Tribunal Supremo.
El Tribunal Supremo ha emitido un auto en el que reprueba al fiscal general del Estado, Álvaro García Ortiz, por la forma en la que ejecutó la sentencia que anuló el nombramiento de Dolores Delgado como fiscal de Sala de la Fiscalía Togada. Los magistrados consideran que García Ortiz no siguió las pautas establecidas por el propio Tribunal Supremo en su sentencia.
El Incumplimiento de la Sentencia del Tribunal Supremo
Según el auto del Tribunal Supremo, la sentencia que anuló el nombramiento de Dolores Delgado ordenaba retroceder el procedimiento de nombramiento al momento anterior a la propuesta al Consejo de Ministros. Sin embargo, el fiscal general se fue a un momento anterior a lo ordenado, a la convocatoria del Consejo Fiscal, y reabrió un trámite que la sentencia consideró definitivo.
Esta actuación del fiscal general fue cuestionada por el fiscal Luis Rueda, otro aspirante al cargo de fiscal de Sala de la Fiscalía Togada, quien presentó un escrito para que se revisara la forma en la que García Ortiz había dado cumplimiento a la sentencia del Tribunal Supremo.
La Designación de la Fiscal Isabel Rodríguez
Tras la anulación del nombramiento de Delgado, el fiscal general propuso para el cargo a la fiscal Isabel Rodríguez, conocida por haber sido la fiscal del ‘caso de La Manada’ en el Tribunal Supremo. Rodríguez tomó posesión del cargo en junio y continúa en el puesto en la actualidad.
La decisión del fiscal general de proponer a Rodríguez para el cargo de fiscal de Sala de la Fiscalía Togada, a pesar de las advertencias del Tribunal Supremo, ha generado nuevas críticas y cuestionamientos sobre la política de nombramientos llevada a cabo por la Fiscalía General del Estado.
En resumen, la polémica en torno a los nombramientos en la Fiscalía Togada del Tribunal Supremo no parece haber llegado a su fin, y el conflicto entre el Tribunal Supremo y la Fiscalía General del Estado sigue generando debates y controversias en el ámbito judicial.
