La Audiencia Provincial de Almería ha condenado a tres hombres por agredir sexualmente a una chica que acudió con una amiga al piso de uno de ellos en Roquetas de Mar (Almería), donde los acusados se aprovecharon del estado de embriaguez en el que se encontraba para forzarla a mantener relaciones sexuales a lo largo de la noche.
Los hechos ocurrieron durante una fiesta de cumpleaños que se celebraba en un piso alquilado por uno de los acusados. La víctima llegó a la celebración acompañada de una amiga, después de haber estado varias horas en el puerto deportivo de Aguadulce. Debido a la ingesta de alcohol y hachís, sus capacidades cognitivas y volitivas se vieron «considerablemente» disminuidas, lo que fue percibido por los acusados.
Dos Momentos Diferenciados de Agresión Sexual
Según la sentencia, los hechos enjuiciados se produjeron en dos momentos diferentes. En el primer momento, los dos principales condenados, «guiados con ánimo de satisfacer su deseo lúbrico, y desoyendo las negativas» de la víctima, que eran «constantes», le «obligaron» a mantener relaciones sexuales mientras que era «sujetada fuertemente».
En un segundo momento, el tercer acusado, del que se desconoce «cuándo entró de nuevo» a la habitación, también se acercó a la víctima, a la que «tiró en la cama» de un «fuerte empujón» para agredirla sexualmente «a pesar de la negativa» de esta, que «apenas podía defenderse».
Condenas y Penas Accesorias
La Sección Tercera de la Audiencia Provincial de Almería impone a los dos acusados de actuar grupalmente once años de prisión por un delito de agresión sexual agravado y por su actuación como cooperadores necesarios, ya que ambos se necesitaron conjuntamente para la violación. Por otro lado, al tercer acusado le impone seis años de cárcel al estimar que, en su caso, no pudo acreditarse que actuara acompañado.
Además de las penas de prisión, el fallo les impone penas accesorias con la prohibición de comunicarse o acercarse a la víctima, libertad vigilada e inhabilitación para trabajar con menores. También se les obliga al pago en total de 100.000 euros de indemnización a la víctima por daños morales.
La sentencia destaca que el testimonio de la víctima y de su amiga, así como los mensajes de WhatsApp enviados poco después de los hechos y la pericial psicológica, fueron fundamentales para dar por probadas las violaciones.