En un escenario económico global marcado por la incertidumbre, el gigante tecnológico surcoreano Samsung Electronics ha logrado emerger como un faro de estabilidad y crecimiento. Los resultados financieros reportados por la compañía para el segundo trimestre del año han dejado boquiabiertos a los analistas y han posicionado a Samsung como uno de los líderes indiscutibles en el dinámico mercado de la tecnología.
El beneficio neto atribuido de Samsung Electronics durante este periodo alcanzó los 9,64 billones de wones (6.490 millones de euros), lo que representa un 521,9% de incremento en comparación con el mismo trimestre del año anterior. Aún más impresionante es el hecho de que este resultado supera en un 45,6% al obtenido en el primer trimestre de 2023, evidenciando la solidez y la capacidad de la compañía para adaptarse y prosperar en un entorno cambiante.
Impulsando la Innovación y la Demanda
La principal fuerza motriz detrás de este excepcional desempeño ha sido la creciente demanda de chips de memoria, incluyendo aquellos destinados a servidores de inteligencia artificial (IA) y unidades de estado sólido. La división de electrónica de consumo y comunicaciones móviles (DX) reportó unos ingresos de 42,07 billones de wones (28.321 millones de euros), un 4,6% más, mientras que la división de memorias (DS) se anotó 28,56 billones de wones (19.226 millones de euros), un 93,9% más.
Además, otras áreas de negocio como SDC y la división de conectividad en vehículos y audio (Harman) también han contribuido de manera significativa a los resultados, aportando 7,65 billones de wones (5.150 millones de euros) y 3,62 billones de wones (2.437 millones de euros), respectivamente, lo que representa un 18,1% y un 3,4% de incremento.
Fortaleciendo la Posición y Preparándose para el Futuro
Samsung Electronics no solo ha logrado alcanzar cifras record en sus resultados, sino que también ha demostrado una sólida gestión de sus costes y gastos. Los costes de producción se ampliaron un 6,4%, hasta los 44,31 billones de wones (29.829 millones de euros), mientras que el combinado de los gastos de I+D, venta, generales y administrativos ascendió a 19,31 billones de wones (12.999 millones de euros), un 9,2% más. Dentro de esta última partida, la innovación acaparó 8,05 billones de wones (5.419 millones de euros), lo que refleja el compromiso de la compañía por mantener su liderazgo tecnológico.
La rentabilidad financiera (ROE) de Samsung Electronics se ha elevado al 11%, en comparación con el 2% registrado doce meses atrás, y el margen sobre el resultado bruto de explotación (Ebitda) se ha incrementado hasta el 27%, cinco puntos más que en los tres meses previos y once más que a mediados de 2023.
Mirando hacia el futuro, Samsung ha expresado su intención de responder activamente a la demanda de productos de alto valor añadido para IA y de ampliar su capacidad para aumentar las ventas de HBM3E. Además, la compañía se centrará en productos de alta densidad, como módulos de servidor basados en la DDR5 de 1b-nm y 32Gb en DRAM de servidor, demostrando su compromiso por mantenerse a la vanguardia de la innovación.






