El bacalao fresco es uno de los pescados más apreciados en la gastronomía mundial por su sabor delicado y su textura firme. Este pescado blanco, además de ser muy versátil en la cocina, es una fuente rica de proteínas y ácidos grasos omega-3, lo que lo convierte en una opción saludable para cualquier dieta. Preparar una receta de bacalao fresco en salsa de tomate puede parecer una tarea complicada, pero en realidad, es un plato que se puede elaborar en menos de 30 minutos, ideal para quienes buscan una comida rápida y deliciosa.
La clave para lograr un bacalao fresco en salsa de tomate perfecto está en la selección de ingredientes de calidad y en la simplicidad de su preparación. Con ingredientes como tomates frescos, cebolla, ajo y algunas hierbas aromáticas, se puede crear una salsa sabrosa que complementa perfectamente el delicado sabor del bacalao. A continuación, te presentamos una receta detallada para que puedas disfrutar de este clásico en la comodidad de tu hogar.
Ingredientes y preparación del bacalao fresco

Para preparar bacalao fresco en salsa de tomate, necesitarás los siguientes ingredientes: cuatro filetes de bacalao fresco, dos tomates maduros, una cebolla, dos dientes de ajo, 200 ml de puré de tomate, una cucharadita de azúcar, sal y pimienta al gusto, y un manojo de perejil fresco. Además, se recomienda tener a mano un poco de aceite de oliva virgen extra para la cocción.
Comienza por cortar la cebolla en juliana fina y picar los dientes de ajo. En una sartén grande, añade un chorro generoso de aceite de oliva y sofríe la cebolla y el ajo a fuego medio hasta que estén dorados. Añade los tomates cortados en cubos y deja que se cocinen durante unos minutos. Incorpora el puré de tomate, la cucharadita de azúcar, sal y pimienta al gusto. Deja que la salsa se cocine a fuego lento mientras preparas el bacalao.
Cocción del bacalao y presentación

Mientras la salsa se espesa y se mezclan los sabores, sazona los filetes de bacalao fresco con sal y pimienta. En una sartén aparte, calienta un poco más de aceite de oliva y cocina los filetes de bacalao durante unos 3-4 minutos por cada lado, dependiendo del grosor de los filetes. El bacalao debe quedar dorado por fuera y jugoso por dentro. Una vez que el bacalao esté cocido, colócalo en la sartén con la salsa de tomate y deja que se impregne de los sabores durante un par de minutos más. Esto permitirá que el bacalao fresco absorba el sabor de la salsa y se mantenga jugoso.
Antes de servir, espolvorea un poco de perejil fresco picado por encima para darle un toque de color y frescura. Para servir el bacalao fresco en salsa de tomate, puedes acompañarlo con una guarnición de arroz blanco, puré de patatas o una ensalada verde. Este plato no solo es una excelente opción para una comida rápida y nutritiva, sino que también es perfecto para sorprender a tus invitados con un plato de alta cocina sin necesidad de pasar horas en la cocina.