El neuromarketing es una disciplina que utiliza técnicas de la neurociencia para entender cómo los consumidores toman decisiones y cómo los estímulos pueden influir en sus comportamientos de compra. Esta estrategia se emplea con frecuencia en supermercados y tiendas, donde los productos son ubicados estratégicamente para atraer la atención de los compradores y fomentar compras impulsivas.
Es importante ser consciente de las tácticas que se utilizan para influir en nuestras decisiones de compra. Desde la disposición de los productos en los estantes hasta el uso de colores y olores, todo está diseñado para maximizar las ventas. A continuación, te presentamos tres consejos efectivos para vencer al neuromarketing y mantener tu presupuesto bajo control al hacer la compra en el supermercado.
Vence el neuromarketing haciendo una lista de compras

Uno de los consejos más efectivos para evitar las trampas del neuromarketing es hacer una lista de compras antes de salir de casa. Esta lista debe incluir solo los artículos que realmente necesitas. Escribe en un papel los productos esenciales que te impulsan a ir al supermercado, como papel higiénico, aceite, sal o detergente para la lavadora. Tener una lista física te ayudará a enfocarte en lo que realmente necesitas y resistir la tentación de comprar productos adicionales que no estaban en tus planes.
El neuromarketing se aprovecha de la tendencia natural a hacer compras impulsivas. Cuando tienes una lista de compras clara y específica, es más fácil resistir estos impulsos. Cada vez que sientas la tentación de comprar algo que no está en tu lista, consulta el papel y evalúa si realmente necesitas ese artículo. Este simple hábito puede ayudarte a filtrar las decisiones de compra a través de una lente de necesidad real versus deseo impulsivo.
Observa los productos en los niveles inferiores

Otra estrategia clave para vencer al neuromarketing es prestar atención a la ubicación de los productos en los estantes. Los productos más caros suelen estar colocados a la altura de los ojos, ya que es la posición más cómoda y visible. Por eso, es importante mirar hacia los niveles inferiores de los estantes, donde suelen encontrarse las opciones más económicas.
El neuromarketing también se vale de la simetría y la equidistancia para atraer nuestra atención hacia los productos ubicados en el centro de los estantes. Estos suelen ser de marcas líderes y, por ende, más caros. Al enfocarte en los niveles inferiores, no solo encuentras productos más baratos, sino también una variedad que puede ser igual de buena en calidad. Esta técnica sencilla puede cambiar drásticamente la cantidad de dinero que gastas en cada compra.
Comparar los precios por kilo de los productos

Finalmente, un consejo crucial es comparar los precios por kilo de los productos, en lugar de fijarte solo en el precio del paquete o de la oferta. La ley obliga a que los productos muestren el coste en euros por kilo, lo cual facilita la comparación entre diferentes marcas y tamaños. El neuromarketing juega con las percepciones de precio, y un paquete en oferta puede parecer una ganga cuando en realidad no lo es si consideramos su precio por kilo.
Al ser consciente del precio por kilo, puedes evitar engaños y hacer una compra más informada y ventajosa. Este hábito te permite evaluar mejor las verdaderas ofertas y evitar ser influenciado por estrategias de neuromarketing que buscan aumentar las ventas a expensas de tu bolsillo. Comparar los precios de esta manera te empodera como consumidor, ayudándote a tomar decisiones más inteligentes y económicas.