El Ministerio de Sanidad ha presentado un nuevo proyecto de real decreto que tiene como objetivo regular la evaluación de tecnologías sanitarias en España. Este proceso, fundamental para garantizar un sistema sanitario equitativo y eficiente, abarca un amplio abanico de elementos, desde medicamentos y procedimientos médicos hasta productos sanitarios y pruebas diagnósticas. El objetivo principal es establecer un marco regulatorio sólido que permita a las autoridades tomar decisiones informadas sobre la incorporación, financiación y eventual desinversión de estas tecnologías, siempre con el objetivo de mejorar la salud de los ciudadanos.
Un Enfoque Integral para Evaluar la Eficiencia y Equidad en Salud
El proyecto de real decreto reconoce la importancia de adaptar la evaluación a la naturaleza diversa de las tecnologías sanitarias. Para ello, se propone una estructura común que, sin embargo, permite configuraciones separadas para medicamentos y productos sanitarios, por un lado, y otro tipo de tecnologías por el otro. Esta distinción busca optimizar el proceso al tiempo que se garantiza una evaluación rigurosa y adaptada a las características específicas de cada tecnología. La AEMPS y la RedETS, instituciones con amplia experiencia en la materia, seguirán desempeñando un papel fundamental en este proceso, aportando su conocimiento técnico y metodológico.
Transparencia y Participación: Pilares Fundamentales del Nuevo Modelo de Evaluación
El proyecto de real decreto destaca por su compromiso con la transparencia y la participación ciudadana. Se busca establecer un modelo claro e independiente, basado en la mejor evidencia científica disponible y con la participación activa de pacientes y profesionales sanitarios. Se pretende así asegurar que las decisiones sobre la incorporación de nuevas tecnologías al Sistema Nacional de Salud respondan a las necesidades reales de la población y a criterios de eficiencia y equidad. La fecha límite para el envío de aportaciones ciudadanas al proyecto es el 20 de septiembre de 2024, lo que subraya el compromiso con la participación ciudadana en el diseño de las políticas sanitarias.