Los agnolottis, un tipo de pasta rellena originaria del Piamonte, Italia, han conquistado los corazones de muchos por su versatilidad y sabor. Tradicionalmente, se preparan con una masa fresca y se rellenan con carne, verduras o quesos, pero hoy te traemos una versión rápida y accesible utilizando un ingrediente muy común en las cocinas argentinas: las tapas de empanada. Esta receta combina la practicidad de las tapas prehechas con un relleno simple y delicioso, ofreciendo una opción rápida para disfrutar de unos exquisitos agnolottis sin pasar horas en la cocina.
El plato se completa con un estofado de pollo, una preparación clásica que aporta la calidez y el sabor necesarios para hacer de estos agnolottis una comida completa. En solo 5 minutos, gracias a la cocción rápida de la pasta, y con el estofado ya preparado, tendrás en tu mesa un plato que fusiona lo mejor de la cocina italiana y argentina, ideal para sorprender a tus seres queridos con un toque gourmet en medio de la semana.
Agnolottis: una pasta casera en minutos
Preparar agnolottis con tapas de empanada es un truco que no solo ahorra tiempo, sino que también permite disfrutar de la textura y el sabor de una pasta casera sin necesidad de amasar. Para el relleno, utilizamos mozzarella, tomates secos hidratados y albahaca fresca. Esta combinación sencilla garantiza un resultado equilibrado, con la cremosidad del queso, contrastando perfectamente con la intensidad de los tomates secos y la frescura de la albahaca. Al usar tapas de empanada, solo necesitas unos minutos para formar los agnolottis y cocinarlos en agua hirviendo.
El estofado de pollo es el acompañamiento perfecto para estos agnolottis. La receta incluye una base de cebolla, zanahoria, morrón y ajo, que junto con el pollo y la salsa de tomate, se cuecen a fuego lento para desarrollar un sabor profundo y reconfortante. Este estofado no solo es delicioso, sino que también es muy versátil, ya que puede servirse con distintos tipos de pasta o incluso con arroz. En esta ocasión, cubrimos los agnolottis con el estofado, creando un plato completo y satisfactorio.
Consejos para un resultado perfecto
Para asegurarte de que los agnolottis queden bien sellados y no se abran durante la cocción, es importante presionar firmemente los bordes de las tapas de empanada. Un tenedor puede ser útil para este propósito, o si prefieres, puedes hacer un repulgue como en las empanadas tradicionales. Además, doblar los bordes hacia el centro después de sellarlos ayuda a darle a los agnolottis su característica forma redondeada.
En cuanto al estofado, no subestimes el poder de un buen desglasado. Al añadir el vino blanco y dejar que se evapore, no solo ayudas a desprender los sabores pegados al fondo de la olla, sino que también aportas una sutil acidez que equilibra la riqueza del plato. Por último, recuerda ajustar la sazón del estofado de pollo antes de servir para resaltar todos los sabores. Preparar agnolottis en casa puede parecer una tarea complicada, pero con esta receta simplificada, es posible disfrutar de este clásico italiano en cuestión de minutos.
