El escenario político español ha sido testigo de un nuevo acto en la controversia que rodea al expresidente catalán Carles Puigdemont. Su reciente regreso a Barcelona, sin ser detenido, y su posterior «segunda huida», han reavivado las tensiones y alimentado un debate cargado de acusaciones y sospechas. En este contexto, Santiago Abascal, líder de Vox, ha alzado la voz para denunciar un supuesto pacto secreto entre el Gobierno y el propio Puigdemont.
Abascal no ha escatimado en calificativos, tildando la situación de «espectáculo» y «humillación» para los españoles. Asevera que el Ejecutivo, en un acto de connivencia con el prófugo de la justicia, orquestó una puesta en escena que permitió a Puigdemont pisar suelo español sin afrontar las consecuencias legales de sus actos. Esta estrategia, según el líder de Vox, no solo evidencia una falta de respeto a la justicia, sino que también socava la confianza en las instituciones y profundiza la división en la sociedad española.
Críticas al PP y la Amenaza de un Pacto con Junts
La postura del Partido Popular (PP) ante este escenario no ha escapado a las críticas de Abascal. El líder de Vox ha cuestionado la apertura del PP a negociar con Junts, el partido de Puigdemont, para formar gobierno. Para Abascal, la ambición de Alberto Núñez Feijóo, líder del PP, por alcanzar la Moncloa lo ha llevado a contemplar pactos que considera inaceptables. En este sentido, ha acusado a Feijóo de estar dispuesto a «ser Sánchez», en alusión a una supuesta continuidad con las políticas del actual presidente del Gobierno, Pedro Sánchez.
Las palabras de Abascal reflejan la desconfianza de Vox hacia cualquier tipo de acercamiento o negociación con partidos independentistas. Para la formación de ultraderecha, la defensa de la unidad de España y la aplicación estricta de la ley son principios irrenunciables que no admiten concesiones. En este contexto, cualquier diálogo o acuerdo que implique reconocer las reivindicaciones independentistas es visto como una traición a la nación.
La Tensión Política se Intensifica ante la Formación de Gobierno
Las acusaciones de Abascal añaden un nuevo elemento de tensión al ya complejo panorama político español. La posibilidad de que el PP, con el apoyo de Vox, llegue a formar gobierno tras las próximas elecciones generales, plantea interrogantes sobre el futuro de la relación con Cataluña. La negativa de Vox a cualquier tipo de concesión al independentismo podría suponer un obstáculo para la gobernabilidad y la estabilidad del país.
Mientras tanto, la situación legal de Puigdemont sigue siendo una incógnita. Su regreso a Bélgica, donde reside desde 2017, lo mantiene fuera del alcance de la justicia española, al menos de momento. La batalla judicial por su extradición continúa, pero su desenlace es incierto. En definitiva, el «caso Puigdemont» sigue abierto, con implicaciones políticas y jurídicas que marcarán la agenda española en los próximos meses.






