domingo, 8 junio 2025

La película de época de Prime Video que te hará llorar con su historia de amor

El verano es un buen momento para encontrar en las plataformas de streaming tesoros escondidos en cuanto a series, películas y documentales. Si eres de los que te encantan las ficciones románticas no te puedes perder la película Retrato de una mujer en llamas que es una obra de arte para muchos y para otros una cinta romántica de calidad. Una película romántica que se puede disfrutar en la plataforma Prime Video y que no te puedes perder.

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Retrato de una mujer en llamas (Portrait de la jeune fille en feu) es una película dramática de época romántica francesa de 2019 escrita y dirigida por Céline Sciamma, protagonizada por Noémie Merlant y Adèle Haenel. Esta cinta es una buena opción para los que les gusta una historia de amor de calidad y no les importa si el final es feliz o no. Para los que no la han visto nunca seguro que verla en Prime Video es una experiencia irrepetible y para los que ya la han visto una ocasión para repetirlo.

La película francesa Retrato de una mujer en llamas ha sido dirigida por Céline Sciama, como hemos explicado, y cuenta una preciosa historia que transcurre en 1770 en Francia. La protagonista es una pintora bastante reconocida que recibe un encargo de una condesa que consiste en realizar un retrato de su hija Héloïse, una joven que acaba de dejar el convento y que su madre quiere casar. Según cómo salga el retrato, su prometido dirá sí o no.

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Retrato de una mujer en llamas

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Una película de altura

Esta cinta romántica destaca por el ritmo lento con el que se desarrollan las escenas que permite hacer un retrato intimista de los personajes. También po el buen guion que permite armar una historia diferente y que sigue interesando. Hay que destacar las  escenas en las que Marianne y Héloïse se miran y sin decir nada se comunican la una con la otra. 

También esta cinta sorprende por banda sonora ya que su directora decidió que solo se escuchasen  los sonidos de la naturaleza o los que surgen en las habitaciones de la casa como los pasos de las protagonistas o el roce del tejido de un vestido con un mueble.

El rodaje tuvo lugar en Saint-Pierre-Quiberon en Bretaña y en un castillo en La Chapelle-Gauthier en Seine-et-Marne. Las pinturas y bocetos de la película fueron realizados por la artista Hélène Delmaire. Entre lo más destacado de esta película están los preciosos paisajes de la campiña francesa. Una película perfecta para verla tranquilamente en el sillón de casa con un pañuelo que no dejará a nadie indiferente. 

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