Los incendios arrasan con casi 38.000 hectáreas este año, lo que representa un descenso del 42,4% respecto a 2023

En lo que va del año 2024, España ha experimentado una notable disminución en la superficie forestal afectada por incendios, lo que representa una tendencia alentadora en la lucha contra este fenómeno devastador. Según los datos proporcionados por el Ministerio para la Transición Ecológica y Reto Demográfico (MITECO), el fuego ha quemado 37.991,67 hectáreas (ha) hasta la fecha, lo que supone un 42,4% menos que en el mismo periodo del 2023 y un 44,5% menos que la media de los últimos diez años.

Estas cifras sitúan a 2024 como el cuarto año con menos hectáreas calcinadas hasta el momento de la última década, alejándose significativamente de los números registrados en 2023 y, especialmente, en 2022, cuando hasta este momento del año habían ardido 227.507,21 ha.

Análisis de los tipos de incendios

En cuanto al tipo de siniestros, MITECO ha informado que de los 4.240 fuegos que han tenido lugar, un total de 2.925 han sido conatos, es decir, que se han extinguido antes de llegar a afectar a una hectárea de superficie. Por otro lado, 1.315 han afectado a más de una hectárea y, de entre ellos, 14 han sido grandes incendios (es decir, han afectado a más de 500 hectáreas). Este número se acerca a los 16 del año pasado y a los 15 de media de la última década, pero se queda muy lejos de los 50 que se registraron hasta el 11 de agosto en 2022.

Publicidad

La disminución en el número de grandes incendios es especialmente relevante, ya que estos suelen causar los mayores daños tanto en términos de superficie afectada como en la destrucción de ecosistemas y la amenaza a las poblaciones cercanas. Esta tendencia a la baja sugiere que las estrategias de prevención y respuesta ante los incendios forestales están dando resultados positivos.

Análisis por tipo de vegetación

En cuanto al tipo de vegetación afectada, hasta la fecha han ardido 8.929,42 ha de superficie arbolada, 22.153,99 ha de superficie de matorral y de monte abierto y 6.908,27 ha de superficie de pastos y dehesas. Estas cifras reflejan la diversidad de ecosistemas que se ven impactados por los incendios forestales, lo que subraya la importancia de implementar medidas de protección y restauración adaptadas a cada tipo de vegetación.

La superficie de matorral y monte abierto ha sido la más afectada, lo que evidencia la necesidad de reforzar las labores de gestión y mantenimiento de estas áreas, a menudo más vulnerables a los incendios. Por otro lado, el menor impacto en los bosques y las dehesas sugiere que las estrategias de prevención y lucha contra incendios en estos ecosistemas más valiosos han sido más efectivas.

En conclusión, los datos presentados por el MITECO muestran una tendencia alentadora en la lucha contra los incendios forestales en España durante el presente año. Sin embargo, es fundamental mantener los esfuerzos y continuar perfeccionando las estrategias de prevención y respuesta para consolidar esta mejora y evitar retrocesos en los próximos años.

Publicidad
Publicidad