La transición hacia una movilidad más sostenible es un reto ineludible en la actualidad. Sin embargo, la adopción de vehículos eléctricos se enfrenta a diversas barreras, siendo la principal el alto coste de adquisición de estos vehículos nuevos. Esta situación limita el acceso a la electrificación a hogares con ingresos elevados, dejando fuera a una parte significativa de la población.
Es crucial que las políticas públicas, como los planes de ayudas a la compra, sean inclusivas y contemplen las necesidades de todas las capas sociales. En este contexto, el vehículo de ocasión se presenta como una alternativa viable para democratizar el acceso a la movilidad eléctrica y acelerar la renovación del parque automovilístico.
Vehículo de Ocasión: Clave para un Plan Moves más Inclusivo
Los datos actuales reflejan que la penetración del vehículo eléctrico sigue siendo limitada, concentrándose principalmente en hogares con alta capacidad adquisitiva. Esta realidad pone de manifiesto que el actual Plan Moves III, al centrarse en la compra de vehículos nuevos, no está llegando a las rentas más bajas, quienes son precisamente los propietarios de los vehículos más antiguos y contaminantes.
Incluir el vehículo de ocasión en el próximo Plan Moves IV, con incentivos específicos para la compra de modelos electrificados usados, permitiría ampliar el acceso a la movilidad sostenible a un mayor número de ciudadanos, independientemente de su nivel de ingresos.
Estrategias para Impulsar la Renovación del Parque Automovilístico
Además de la inclusión del vehículo de ocasión en los planes de ayudas, existen otras medidas que podrían contribuir a rejuvenecer el parque automovilístico y avanzar hacia una movilidad más limpia:
- Recuperar el sistema de achatarramiento: Incentivar la sustitución de vehículos antiguos sin etiqueta medioambiental por otros más eficientes, ya sean eléctricos, híbridos o de combustión con etiqueta C, ECO o 0, siempre que no superen los 10 años de antigüedad.
- Ajustar la cuantía de las ayudas: Establecer tramos de ayuda en función de la etiqueta ambiental del vehículo adquirido, priorizando los modelos más sostenibles.
- Deducciones fiscales: Implementar deducciones en el impuesto de matriculación o en el IVA para la compra de vehículos eléctricos, especialmente en modelos de acceso con precios más asequibles.
- Fomentar el ‘retrofit’: Incluir en los planes de ayudas la transformación de vehículos de combustión a eléctricos, una opción que permitiría alargar la vida útil de vehículos existentes y reducir su impacto ambiental.
La renovación del parque automovilístico español es un desafío complejo que requiere de un enfoque integral y realista. Incorporar el vehículo de ocasión en las estrategias de apoyo a la electrificación y contemplar medidas complementarias como las mencionadas anteriormente, permitirá acelerar la transición hacia una movilidad más sostenible e inclusiva.