Josep Lluís Trapero, el nuevo director general de los Mossos d’Esquadra, ha animado a sus agentes a no perder «la esencia» del cuerpo policial. Aunque reconoce que en los últimos años se han conseguido «metas importantes», Trapero asegura que aún hay «mucho margen de mejora» y se ha comprometido a trabajar para seguir impulsando la seguridad ciudadana, las oficinas de denuncias y el servicio de proximidad.
El nuevo directivo ha admitido que le ha costado «dejar el uniforme policial» para asumir este cargo, ya que es una profesión que le apasiona. Sin embargo, está convencido de que desde su nuevo rol podrá ser «más útil a la organización policial y también al conjunto de la ciudadanía». Su objetivo principal es ayudar a definir e implementar las políticas de seguridad que llevará a cabo la Conselleria de Interior.
El Papel Fundamental de los Agentes en el Territorio
Trapero ha remarcado la importancia de los policías de proximidad y de aquellos que trabajan «a pie de calle», ya que son quienes «atienden a las víctimas» y «orientan a quien lo necesita». Además, ha instado a los agentes a pensar siempre en tener «un impacto positivo para el ciudadano» y que el sentido de sus acciones sea «mejorar la vida de las personas, hacerla más fácil o resolver las dificultades que puedan encontrar».
Mantener la Esencia del Cuerpo Policial
En un momento de «incertidumbres» y cambios constantes, Trapero ha animado a los agentes a no perder «su esencia», es decir, aquello que les «reconocemos» y les hace sentir «seguros». Según el nuevo director general, cuando todo parece «etéreo» y se pasa «del elogio, tal vez tan infundado, a la crítica feroz», es fundamental aferrarse a lo que define la identidad del cuerpo policial.
En definitiva, Josep Lluís Trapero ha asumido con «energía renovada y muchas ganas» su nuevo cargo al frente de los Mossos d’Esquadra. Su compromiso es impulsar la mejora continua de la organización policial y garantizar que los agentes mantengan viva la esencia que les caracteriza en su servicio a la ciudadanía.
