La propuesta del cupo catalán ha sido un tema de gran controversia en España. El líder del Partido Popular, Alberto Núñez Feijóo, ha sido claro en su postura: si llega a La Moncloa, derogará este «cupo separatista» que considera «inconstitucional» y un «desafío nacional» contra la igualdad de todos los españoles.
Feijóo ha acusado al Gobierno de Pedro Sánchez de «comportarse como un caudillo en su partido«, al establecer este acuerdo con ERC que, según él, supone «derogando la Constitución in voce«. El dirigente popular afirma que los españoles tendrán que financiar los 13.000 millones de euros que costará este cupo, lo que disminuirá los recursos del Estado y las autonomías para educación, servicios sociales y otras áreas clave.
El Independentismo Fiscal en Tela de Juicio
Feijóo considera que este «independentismo fiscal» va en la línea del «soberanismo» que plantea el proceso de Cataluña y que ahora también defiende el Partido Socialista «sin ambages». Por ello, ha asegurado que si llega al Gobierno de España, derogará el cupo catalán para «volver a cumplir la Constitución.
Además, ha garantizado que ninguna comunidad autónoma gobernada por el PP asumirá esta «bilateralidad«, pues su formación no tiene «una concepción bananera del Gobierno, de la ley y de las instituciones«. Feijóo ha sido enfático al afirmar que la igualdad y la solidaridad son «la bandera que en este momento solamente empuña el Partido Popular«.
El Impacto Económico y Social
Según las declaraciones de Feijóo, el impacto económico de este cupo catalán sería significativo. Calcula que, de extrapolarse al conjunto de la nación, supondría 33.000 millones de euros adicionales que tendrían que asumir los españoles, «además de los que ya hemos pagado en el mayor incremento de presión fiscal«.
El dirigente popular advierte que esto disminuiría los recursos destinados a áreas clave como infraestructuras estatales, educación, servicios sociales y dependencia, mermando así la capacidad de las comunidades autónomas para atender estas necesidades fundamentales de la ciudadanía.
En resumen, la propuesta del cupo catalán ha generado una fuerte oposición por parte del Partido Popular, que lo considera un desafío a la igualdad y a la Constitución, con un impacto económico y social que sería perjudicial para el conjunto de los españoles. La postura de Feijóo deja claro que, de llegar a La Moncloa, su Gobierno estaría dispuesto a derogar este acuerdo y volver a los principios de igualdad y solidaridad que, según él, solo defiende en la actualidad el Partido Popular.