El Partido Popular (PP) ha presentado una proposición no de ley en el Parlamento de Cantabria para derogar la Ley de Memoria Histórica y Democrática de Cantabria, aprobada en la anterior legislatura por el Gobierno PRC-PSOE. Los populares argumentan que la ley fue «impuesta sin consenso» y que contiene elementos «propios de una dictadura comunista» que «dividen y enfrentan a la sociedad», como la Comisión de la Verdad o el «adoctrinamiento en las aulas».
El diputado regional y senador autonómico del PP, Íñigo Fernández, ha afirmado que «por encima de todo» se trata de una iniciativa «de higiene democrática» y que la derogación «va a suscitar mucho más consenso que su aprobación», ya que «se apoya en el sentido común y en el respeto a la convivencia y no en la imposición y el sectarismo». Además, el PP se compromete a mantener el apoyo del Gobierno a los procedimientos de localización o exhumación de restos y garantizar la custodia del material documental.
La respuesta del PSOE: «Un ataque directo a nuestros derechos»
Por su parte, el Partido Socialista (PSOE) ha exigido al PP que «frene su ofensiva» para derogar una ley que, según el diputado autonómico y portavoz de Memoria Histórica del Grupo Parlamentario Socialista, Mario Iglesias, se aprobó «para devolver la dignidad y memoria de las víctimas y cerrar heridas aún abiertas». Iglesias ha criticado que el PP y Vox «siempre han tenido problemas con la memoria» y ha advertido a la presidenta del Gobierno de Cantabria, María José Sáenz de Buruaga, que «no se le olvide que contamos con una Ley de Memoria Histórica estatal, que su Gobierno tiene obligación de cumplir y no lo está haciendo».
El debate sobre la memoria histórica, un tema que sigue generando polémica
La propuesta del PP para derogar la Ley de Memoria Histórica de Cantabria ha reavivado el debate sobre la memoria histórica en la región. Mientras que los populares consideran que la ley «divide y enfrenta a la sociedad», el PSOE la defiende como un instrumento para «devolver la dignidad y memoria de las víctimas». Este debate pone de manifiesto la profunda polarización que sigue existiendo en torno a este tema, que sigue generando polémica y enfrentamientos políticos.