Los precios de los carburantes en España han experimentado una nueva bajada esta semana, situándose tanto el diésel como la gasolina en mínimos desde finales de enero de 2022. Este contexto se ve marcado por la llegada del otoño y el final de las vacaciones de verano, cuando más desplazamientos por carretera suele haber.
Estos descensos en los precios de los combustibles se enmarcan en una tendencia a la baja que se ha mantenido durante las últimas semanas, lo que ha permitido a los conductores españoles ahorrar una cantidad considerable de dinero a la hora de repostar. A continuación, analizaremos en detalle esta situación y sus implicaciones.
EL DIÉSEL, EN SU NIVEL MÁS BAJO DESDE HACE DOS AÑOS
El precio medio del litro de diésel se ha situado en 1,38 euros, lo que supone una bajada del 1,8% respecto a la semana anterior. Esta novena caída consecutiva lo sitúa en su nivel más bajo desde hace dos años.
Por su parte, el precio medio del litro de gasolina también ha descendido un 1,8% en la última semana, acumulando también nueve caídas seguidas, para retroceder hasta los 1,502 euros, la cifra más baja desde principios de 2022.
De esta manera, la gasolina acumula un descenso del 7,28% y el diésel una bajada del 8% desde que iniciaron en julio de este año una espiral de descensos, coincidiendo con el período vacacional de verano, cuando más desplazamientos por carretera suele haber.
MÁS BARATOS QUE ANTES DE LA GUERRA DE UCRANIA
Además, el precio medio del litro del diésel se mantiene por debajo de los niveles en que estaba antes del estallido de la invasión rusa de Ucrania, que comenzó el 24 de febrero de 2022, cuando era de 1,479 euros el litro. La gasolina, también se mantiene ligeramente por debajo, ya que tenía un precio de 1,591 euros el litro en ese momento.
Igualmente, ambos carburantes continúan lejos de los máximos que registraron el verano de 2022, en julio, cuando la gasolina alcanzó los 2,141 euros y el gasóleo los 2,1 euros.
AHORROS SIGNIFICATIVOS PARA LOS CONDUCTORES
Con los precios actuales, llenar un depósito medio de 55 litros de diésel tiene un coste de unos 75,9 euros, unos 15,95 euros menos que en las mismas fechas del año pasado, cuando ascendía a unos 91,85 euros.
Para los vehículos de gasolina, llenar un depósito medio (55 litros) supone un desembolso actualmente de unos 82,61 euros, en torno a 13,6 euros menos que en la misma semana de septiembre de 2023, momento en el que el precio era de 96,25 euros.
Precios en España por debajo de la media europea
Con estos niveles, el precio de la gasolina sin plomo de 95 se mantiene en España por debajo de la media de la Unión Europea, situada en 1,628 euros el litro, y de la eurozona, con un precio medio de 1,675 euros.
En el caso del diésel, el precio en España también es inferior al de la media de la UE, que es de 1,515 euros, y de la zona euro, donde marca un precio de 1,537 euros.
Estos datos evidencian que los conductores españoles están disfrutando de precios de los carburantes más económicos que la media de sus homólogos europeos, lo que sin duda supone un alivio para sus bolsillos en un contexto marcado por la inflación y el encarecimiento generalizado de los bienes y servicios.
La evolución de los precios de los carburantes depende de múltiples factores, como su cotización específica (independiente de la del petróleo), la evolución del crudo, los impuestos, el coste de la materia prima y de la logística y los márgenes brutos. Además, la evolución en la cotización del crudo no se traslada directamente a los precios de los carburantes, sino que lo hace con un decalaje temporal.
En definitiva, los conductores españoles pueden disfrutar en la actualidad de unos precios de los carburantes más competitivos que la media europea, lo que sin duda supone un alivio en sus bolsillos en un contexto económico complejo.