La inmunoterapia se ha convertido en una de las principales estrategias de tratamiento en el ámbito de la oncología. Los avances en este campo han demostrado efectos positivos en diversos tipos de cáncer, incluyendo el cáncer de mama triple negativo, uno de los subtipos más agresivos y con peor pronóstico. Un estudio reciente realizado por el International Breast Cancer Center-Pangaea Oncology de Barcelona (IBCC) ha revelado resultados alentadores sobre la combinación de inmunoterapia y quimioterapia en este tipo de cáncer.
El estudio, publicado en la prestigiosa revista ‘The New England Journal of Medicine’, se basó en un ensayo clínico que involucró a 1.174 pacientes con cáncer de mama triple negativo, provenientes de 181 centros sanitarios en 21 países de diferentes regiones del mundo. Los investigadores analizaron el impacto de añadir pembrolizumab, un tipo de inmunoterapia, a la quimioterapia convencional, tanto antes como después de la cirugía para extirpar los tumores.
Mejores Resultados con Inmunoterapia y Quimioterapia
Los resultados del estudio demuestran que la combinación de inmunoterapia y quimioterapia tiene mejores resultados que la administración exclusiva de quimioterapia. A los 5 años de seguimiento, el 86,6% de las pacientes que recibieron la terapia combinada seguían con vida, en comparación con el 81,7% de supervivencia global en el grupo tratado solo con quimioterapia y placebo.
Javier Cortés, director del IBCC, afirma que añadir pembrolizumab a la quimioterapia se traduce en más curaciones, lo que respalda la recomendación de que este procedimiento debería convertirse en la terapia estándar para pacientes con cáncer de mama triple negativo con un tamaño de tumor de 2 centímetros o más. Cortés destaca que esta terapia combinada aumenta 5 puntos las posibilidades de curación de las pacientes, lo que significa que de cada 100 pacientes tratadas con inmunoterapia, hay 5 pacientes más que se van a curar cuando antes no lo hacían.
Tiempo Libre de Enfermedad Aumenta con Terapia Combinada
Además de la mejora en la supervivencia global, el estudio también reveló avances en el tiempo que las pacientes vivieron libres de enfermedad. El grupo tratado con la combinación de quimioterapia y pembrolizumab estuvo una media de 55,3 meses sin cáncer de mama, en comparación con los 54,1 meses del grupo que recibió quimioterapia y placebo.
Si bien estos resultados son alentadores, Cortés recalca que aún queda mucho por hacer, ya que hay pacientes que siguen falleciendo a causa de este tipo de cáncer. Esto subraya la necesidad de continuar investigando en busca de nuevas estrategias terapéuticas que puedan mejorar aún más los resultados para las pacientes con cáncer de mama triple negativo.
