En un giro dramático en las relaciones diplomáticas entre España y Venezuela, el ministro de Asuntos Exteriores español, José Manuel Albares, se encuentra en Nueva York esta semana con la firme intención de exigir respuestas sobre la situación de dos ciudadanos españoles detenidos por el gobierno venezolano.
Albares, quien ya había abordado este tema en una llamada telefónica con su homólogo venezolano, Yván Gil, hace una semana, está decidido a presionar aún más en esta reunión con el objetivo de obtener información clara sobre la identidad, los cargos y el paradero de estos españoles.
La Detención de los Ciudadanos Españoles
El pasado 14 de septiembre, el ministro del Interior venezolano, Diosdado Cabello, anunció la detención de Andrés Martínez Adasme, de 32 años, y José María Basoa Valdovinos, de 35, quienes supuestamente fueron arrestados en Puerto Ayacucho como parte de un complot orquestado por la oposición para asesinar al presidente Nicolás Maduro y a otros líderes chavistas.
Según las autoridades venezolanas, ambos hombres estarían vinculados con el CNI (Consejo Nacional de Inteligencia), algo que el gobierno español ha negado rotundamente, afirmando que los detenidos no trabajaban para ningún organismo público. Las familias de los españoles informaron que perdieron el rastro de ellos en Inírida, Colombia, el 2 de septiembre, cuando se dirigían a Puerto Ayacucho, y presentaron una denuncia por su desaparición ante la Ertzaintza el 9 de septiembre.
La Exigencia del Gobierno Español
Ante esta situación, el ministro Albares se muestra firme en su determinación de obtener respuestas concretas de las autoridades venezolanas. En su entrevista con La Sexta, ha expresado que su intención es «trasladar enérgicamente esa exigencia» a su homólogo venezolano, Yván Gil, durante su reunión en Nueva York.
Albares ha recordado que el Derecho Internacional y las Convenciones de Viena obligan a Venezuela a brindar información y acceso a los detenidos, con el fin de que el gobierno español pueda ofrecer la protección diplomática y consular correspondiente.
Además, Albares tiene previsto reunirse con los ministros de Asuntos Exteriores de Brasil, Colombia y México para analizar qué medidas se pueden tomar con el objetivo de facilitar el diálogo y encontrar una solución, la cual, según el ministro, «sólo puede venir desde Venezuela y entre venezolanos».
En resumen, el gobierno español, a través de su ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares, se encuentra en una posición firme y decidida a exigir respuestas y acciones concretas a las autoridades venezolanas en relación con la detención de los dos ciudadanos españoles. La resolución de este caso será clave para determinar el rumbo de las relaciones entre ambos países en los próximos meses.