Las croquetas de espinacas y queso azul son la mezcla perfecta para aquellos que buscan innovar en la cocina sin dejar de lado los sabores tradicionales. Con una textura cremosa y un toque intenso que despierta el paladar, estas croquetas se han convertido en una opción irresistible tanto para vegetarianos como para los amantes del buen comer. Si alguna vez pensaste que las croquetas eran aburridas, esta receta te hará cambiar de opinión.
2Proceso para hacer esta variación deliciosa y diferente de una receta muy tradicional
El proceso comienza preparando la bechamel, que es el corazón de estas croquetas de espinacas y queso azul. Derrite la mantequilla en una sartén y añade la harina, cocinándola hasta obtener una mezcla homogénea. Poco a poco, incorpora la leche caliente mientras remueves constantemente para evitar grumos.
Una vez que la bechamel alcance una consistencia espesa, agrega las espinacas previamente salteadas y el queso azul desmenuzado. Remueve hasta que todo esté bien integrado y deja enfriar la mezcla en el frigorífico durante unas horas para facilitar el formado de las croquetas.
Cuando la masa esté lista, forma pequeñas porciones con tus manos y pásalas primero por huevo batido y luego por pan rallado. Este paso es crucial para conseguir ese exterior crujiente que contrasta maravillosamente con el interior suave y cremoso. Fríelas en abundante aceite caliente hasta que estén doradas y colócalas sobre papel absorbente para eliminar el exceso de grasa.
