El café, esa bebida aromática y estimulante que forma parte de la rutina diaria de millones de españoles, es mucho más que una simple taza humeante. Existen infinidad de variedades, orígenes, tuestes y preparaciones que dan lugar a una amplia gama de sabores y aromas. Sin embargo, en los lineales de los supermercados, junto a las opciones de café natural y torrefacto, encontramos una tercera categoría que a menudo genera confusión: el café mezcla. ¿Qué se esconde detrás de esta denominación?
El café mezcla, como su propio nombre indica, es una combinación de café torrefacto y café natural, en proporciones que pueden variar según el fabricante. Esta mezcla, que a menudo se presenta como una opción más económica, puede tener un impacto en nuestro organismo que va más allá del simple aporte de cafeína, y en algunos casos, podría estar relacionada con problemas para conciliar el sueño. Analizaremos los secretos de este tipo de café y sus posibles efectos en nuestro descanso nocturno.
1CAFÉ TORREFACTO: EL «INGREDIENTE SECRETO» DEL CAFÉ MEZCLA
Para entender qué es el café mezcla, es fundamental comprender primero qué es el café torrefacto. A diferencia del café natural, que se obtiene simplemente tostando los granos de café, el café torrefacto se tuesta añadiendo azúcar al proceso. Este azúcar, que puede llegar a representar hasta un 15% o 20% del peso total del producto final, se carameliza durante el tostado, recubriendo los granos de café con una capa oscura y brillante.
El resultado es un café de color muy oscuro, casi negro, con un sabor más intenso y amargo que el café natural. Además, el proceso de torrefacción genera una serie de compuestos químicos, como acrilamidas y furanos, que han sido objeto de debate por sus posibles efectos nocivos para la salud a largo plazo.
La principal razón por la que se utiliza café torrefacto en el café mezcla es económica. El azúcar es más barato que el café, por lo que añadir azúcar al proceso de tostado permite reducir los costes de producción. Sin embargo, esta práctica tiene un impacto en la calidad del producto final y, potencialmente, en nuestra salud. La acidez estomacal es otro problema común asociado al consumo de café torrefacto.
