La tendencia gastronómica que ha cautivado a los amantes de lo exótico en el continente asiático finalmente pisa suelo español. El café azul está revolucionando el panorama de las bebidas en nuestro país con su llamativo color y sus supuestos beneficios para la salud, despertando curiosidad entre consumidores y profesionales del sector hostelero. También conocido como té de mariposa o infusión de flores de clitoria, esta bebida no solo sorprende por su espectacular tonalidad, sino por las propiedades que sus defensores le atribuyen en términos de bienestar.
La llegada de esta innovadora bebida a España marca un hito en la diversificación de la oferta de infusiones y alternativas al café tradicional. Procedente de países como Tailandia, Malasia e Indonesia, donde se consume desde hace décadas, el café azul ha encontrado en el mercado occidental un público receptivo a nuevas experiencias sensoriales y, en particular, a productos que combinan atractivo visual con promesas de mejora en la salud, un nicho en expansión que las empresas del sector han sabido identificar con acierto. Su capacidad para cambiar de color con unas gotas de limón añade un componente lúdico que multiplica su atractivo en redes sociales, convirtiéndolo en objeto de innumerables fotografías y vídeos virales.
5CONSEJOS PARA DISFRUTAR DEL CAFÉ AZUL EN CASA
Preparar café azul en el hogar resulta sorprendentemente sencillo una vez se consiguen las flores secas de clitoria, disponibles ya en tiendas especializadas, herbolarios e incluso en algunos supermercados con sección gourmet. La elaboración básica consiste en infusionar entre 5 y 10 flores en agua caliente a unos 85 grados durante aproximadamente 5 minutos, tiempo suficiente para que liberen su característico pigmento azul. Para quienes deseen experimentar, las posibilidades de personalización son prácticamente infinitas, desde añadir miel o edulcorantes naturales hasta combinar el café azul con leche de coco para obtener una bebida cremosa con toques tropicales.
Los aficionados a la cocina creativa encuentran en el café azul un aliado versátil que trasciende lo líquido para incorporarse a masas de repostería, helados artesanales o incluso platos salados como risottos o salsas para pescado. La clave para obtener los mejores resultados reside en la calidad de las flores utilizadas y en controlar la temperatura del agua, evitando el exceso de calor que podría degradar los compuestos responsables tanto del color como de las propiedades saludables. Además, para apreciar plenamente la experiencia cromática que caracteriza al café azul, se recomienda servirlo en recipientes de cristal transparente que permitan observar el espectáculo visual que supone su cambio de color al añadir unas gotas de limón, convirtiendo una simple bebida en toda una experiencia sensorial digna de compartir con invitados o en redes sociales.