viernes, 9 mayo 2025

‘No fue culpa mía’; 5 errores de percepción al volante que provocan accidentes

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Falsos mitos, sesgos cognitivos y consecuencias legales según la Ley y la interpretación de las aseguradoras 

Cada mes de mayo se celebra en España el Mes de la Seguridad Vial, un momento clave para concienciar sobre los riesgos al volante, las lesiones derivadas de accidentes y los derechos de las víctimas. 

Desde la perspectiva jurídica de Calculatuindemnizacion.es, una plataforma especializada en reclamar indemnizaciones por accidente de tráfico, hay una frase que se repite con demasiada frecuencia tras un siniestro: 

“No fue culpa mía.” 

Sin embargo, en muchos casos, esa percepción no se corresponde con lo que determina la Ley sobre Responsabilidad Civil y Seguro en la Circulación de Vehículos a Motor, ni con lo que las aseguradoras reconocen al valorar la responsabilidad. 

Este artículo analiza 5 errores de percepción frecuentes al volante que provocan accidentes. Detrás de cada uno hay falsos mitos, sesgos cognitivos y, sobre todo, consecuencias legales que pueden condicionar la indemnización por accidente de tráfico

“Lo vi perfectamente, estaba lejos” 

Subestimar la velocidad ajena puede salir caro 

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Muchos accidentes ocurren porque uno de los conductores cree que tiene tiempo de sobra para girar, incorporarse o adelantar. El problema es que, en carretera, el ojo humano tiende a subestimar la velocidad de los vehículos que se aproximan. 

Consecuencias legales: 

Aunque la persona creyera tener espacio para maniobrar, si invadió la trayectoria de otro vehículo que tenía prioridad, la aseguradora contraria puede negar la indemnización o proponer una compensación reducida por concurrencia de culpas. 

“Yo tenía la prioridad, no tenía que frenar” 

Tener preferencia no exime de toda responsabilidad 

Es habitual pensar que quien tiene prioridad puede circular sin preocuparse por los demás. Pero la ley y los peritos técnicos valoran si el conductor actuó con un mínimo de prudencia y prevención, especialmente en entornos urbanos. 

Consecuencias legales: 

Si el vehículo con prioridad no hizo lo razonablemente esperable para evitar el accidente —como reducir velocidad o estar atento a peatones—, la aseguradora puede alegar responsabilidad parcial. Esto afectará directamente a la cantidad a indemnizar. 

“Él iba muy rápido, yo no tengo culpa” 

El exceso de velocidad del otro no te exonera 

Aunque el otro vehículo supere la velocidad permitida, eso no convierte automáticamente al otro conductor en el único responsable. Si se cometió una infracción previa —como saltarse un ceda el paso o invadir un carril sin señalizar—, puede haber responsabilidad compartida. 

Consecuencias legales: 

Las aseguradoras revisan todos los factores y pueden reducir la cuantía de la indemnización si concluyen que ambos conductores contribuyeron al accidente. La figura de la concurrencia de culpas es clave en este tipo de siniestros. 

“El patinete apareció de la nada” 

Invisibilizar a los usuarios vulnerables no te libra de la culpa 

Uno de los errores más frecuentes es no detectar a tiempo a ciclistas, patinetes o peatones, especialmente en rotondas, cruces o zonas de baja visibilidad. El cerebro no siempre reconoce lo que no espera encontrar. 

Consecuencias legales: 

La ley otorga una protección especial a los usuarios vulnerables. Si un vehículo no los respeta, aunque no los haya visto, la aseguradora puede reconocer la culpa del conductor y exigir la indemnización correspondiente al afectado. 

“Fue solo un golpe leve, no se puede reclamar” 

Las lesiones pueden tardar en aparecer 

Un accidente sin grandes daños visibles puede seguir siendo indemnizable. Es común que lesiones cervicales, lumbares o psicológicas no se manifiesten inmediatamente. Lo mismo ocurre con daños materiales como gafas rotas, cascos o dispositivos electrónicos. 

Consecuencias legales: 

Si la víctima no acude a urgencias o no recoge pruebas médicas en las primeras horas, la aseguradora puede rechazar la reclamación alegando falta de nexo causal. Por eso es fundamental documentar todo desde el primer momento. 

¿Cómo puede ayudar Calculatuindemnizacion.es? 

Calculatuindemnizacion.es es un despacho de abogados especializado en reclamar indemnizaciones por accidentes de tráfico de forma rápida, online y transparente. Cuenta con un equipo de abogados expertos en accidentes de tráfico, médicos peritos, valoradores del daño corporal y especialistas en seguros, que acompañan al afectado desde el primer momento. El despacho:

Evalúa gratuitamente si hay derecho a indemnización. 

Asume toda la gestión con la aseguradora contraria, para que sus clientes no tengan que preocuparse de nada. 

Calcula de forma precisa todos los conceptos reclamables, incluyendo secuelas, días de baja, pérdida de ingresos, daños materiales y necesidades futuras. 

Asegura que la oferta de indemnización sea justa y acorde a la ley, evitando que la víctima acepte menos de lo que le corresponde. 

Gracias a su modelo de asesoramiento legal gratuito, cualquier persona que haya sufrido un accidente puede conocer sus derechos antes de aceptar una propuesta de la aseguradora.  

Conclusión: la percepción no siempre vale más que los derechos 

Conducir con seguridad no solo significa evitar accidentes, sino también entender cómo se valora la responsabilidad legal en un siniestro. La ley no premia percepciones subjetivas, sino hechos objetivos. Por eso es tan importante contar con ayuda experta que defienda lo que realmente corresponde. 

Si se ha tenido un accidente y no se sabe si se puede reclamar una indemnización, consultar con Calculatuindemnizacion.es

La salud, el tiempo y los derechos valen más de lo que se puede imaginar.  

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