La mayoría de los hogares españoles cuenta con conexión a internet, pero pocos usuarios son conscientes del peligro que acecha desde su propio salón. El router que utilizamos diariamente para navegar por la red puede convertirse en la puerta perfecta para que los ciberdelincuentes accedan a nuestra información personal si no tomamos las precauciones adecuadas. Según los datos del Instituto Nacional de Ciberseguridad (INCIBE), los ataques dirigidos a dispositivos domésticos aumentaron un 47% durante el último año, lo que refleja la creciente amenaza que enfrentamos.
La vulnerabilidad de estos pequeños dispositivos no es ninguna novedad para los expertos en seguridad informática, quienes llevan años advirtiendo sobre los riesgos de mantener la configuración predeterminada. Los ciberdelincuentes han perfeccionado sus técnicas para aprovechar estas brechas de seguridad, utilizando software especializado que puede detectar routers mal protegidos en cuestión de segundos, facilitando así el acceso no autorizado a nuestras redes domésticas. Dos sencillos pasos, cambiar la contraseña y actualizar el firmware, pueden marcar la diferencia entre una conexión segura y poner en bandeja toda nuestra vida digital a desconocidos.
2POR QUÉ TU CONTRASEÑA PREDETERMINADA ES EL SUEÑO DE CUALQUIER HACKER

Los fabricantes de routers suelen configurar sus dispositivos con credenciales genéricas como «admin/admin» o combinaciones sencillas que facilitan la primera instalación, pero que representan un grave riesgo si no se modifican posteriormente. Estas contraseñas predeterminadas están documentadas en los manuales de usuario y, por tanto, son de conocimiento público y constituyen el primer vector de ataque para cualquier ciberdelincuente interesado en vulnerar nuestra red. En muchos casos, ni siquiera es necesario un ataque sofisticado; basta con probar una lista de contraseñas predeterminadas asociadas a cada modelo de router para obtener acceso.
La situación se agrava con el uso de algoritmos automatizados que pueden probar miles de combinaciones por segundo, haciendo que incluso contraseñas ligeramente más complejas sean vulnerables si no se cambian regularmente. Los expertos en ciberseguridad recomiendan crear contraseñas únicas de al menos 12 caracteres que combinen letras, números y símbolos. Un estudio reciente reveló que un router con la contraseña predeterminada puede ser comprometido en menos de 25 segundos, mientras que una contraseña robusta podría requerir varios años de cálculo computacional para ser descifrada. Este simple cambio, que apenas toma cinco minutos, representa la primera línea de defensa contra intrusiones no deseadas en nuestra red doméstica.