sábado, 10 mayo 2025

Descubre la receta del dulce de calabaza al estilo asturiano, reconfortante y delicioso

El dulce de calabaza es uno de esos sabores que evocan el otoño, las cocinas humeantes de las abuelas y las sobremesas largas en familia. En Asturias, esta receta adquiere un matiz especial, pues no es solo una forma de conservar la calabaza, sino también una celebración de la sencillez bien hecha. Con pocos ingredientes y mucho amor, se transforma en una mermelada espesa, fragante y suave que acompaña tanto una rebanada de pan como un queso curado o una tarta casera.

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Aunque hay muchas versiones del dulce de calabaza, el estilo asturiano tiene ese toque rústico y casero que lo distingue. Se cuece a fuego lento, sin prisas, como se ha hecho toda la vida en los pueblos del norte. Y quizá ahí resida su encanto, justamente en tomarse el tiempo necesario para extraer lo mejor de un producto humilde. Si alguna vez probaste este dulce en casa de una abuela asturiana, seguro que no lo has olvidado.

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Ingredientes para un delicioso dulce de calabaza

Fuente: Freepik

Para preparar el auténtico dulce de calabaza al estilo asturiano, se necesita una buena base, es que debe ser una calabaza de temporada, firme y madura. Lo ideal es optar por una variedad con pulpa densa y dulce, como la calabaza de cidra o de cabello de ángel, aunque también se puede utilizar calabaza común. A eso se le suma azúcar, ya sea blanco o moreno, según el gusto de cada persona, y el jugo de un limón, que ayuda a espesar y equilibrar el dulzor. En algunas casas, se añade también canela o un clavo de olor, para dar un perfume más profundo y especiado.

Las proporciones suelen variar según la tradición familiar, pero una buena referencia es usar 500 gramos de azúcar por cada kilo de calabaza pelada. Si se busca una textura más ligera, se puede reducir un poco la cantidad. No obstante, lo importante es respetar la cocción lenta y constante, ya que este es un dulce que se transforma con el tiempo y el calor. Algunos incluso lo dejan reposar unas horas antes de terminar la cocción, para que los sabores se asienten.

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