La tarta de higo y miel es uno de esos postres que consiguen transportar directamente al Mediterráneo con solo un bocado. Su sabor, equilibrado entre el dulzor natural de la miel y la intensidad de los higos, convierte cada porción en una experiencia sensorial. Perfecta para una merienda especial, una comida al aire libre o como broche final en una cena elegante, esta tarta demuestra que lo sencillo, cuando está bien hecho, puede ser también sofisticado.
Además, la tarta de higo y miel no solo enamora por su sabor, sino también por su aspecto. Los higos, al hornearse, adquieren un tono dorado y una textura suave que contrasta con la base crujiente y el relleno cremoso. Es una receta que respeta los ingredientes de temporada y los presenta de una forma natural y honesta. Aquellos que valoran la cocina con alma y con raíces encontrarán en esta tarta una deliciosa aliada.
2Preparación paso a paso de esta exquisita tarta
El primer paso para elaborar la tarta de higo y miel es preparar la base. Se mezcla la harina con la mantequilla hasta obtener una textura arenosa, se añade azúcar y una yema de huevo para unir la masa. Después de dejarla reposar en frío durante unos minutos, se estira y se coloca en un molde, horneándola ligeramente para que adquiera firmeza antes de añadir el relleno. Este paso asegura que la base quede crujiente y no se humedezca con la mezcla cremosa.
Después, se mezcla el queso con la miel, el limón y la canela, batiendo hasta lograr una crema uniforme. Esta mezcla se vierte sobre la base precocida y se colocan los higos partidos en mitades, presionando suavemente para que queden semienterrados. La tarta de higo y miel se hornea durante unos 30 minutos a temperatura media, hasta que los bordes estén dorados y los higos caramelizados. Al salir del horno, un pequeño hilo de miel por encima le da el toque final perfecto.
