En un evento que ha dejado en incertidumbre a cientos de familias, la cadena de supermercados Alcampo, anunció en días pasados sobre el próximo cierre de 25 tiendas que presentan «dificultades». La decisión que se hizo pública mediante un comunicado, afectará a un máximo de 710 empleados «de una plantilla que alcanza los 23.300»trabajadores en todo el territorio español.
Esta medida representa un angustia para las personas que son sustento principal del hogar y todos aquellos que tenían este empleo como una fuente única de ingreso en sus hogares. Ahora solo les tocará esperar qué les deparará la decisión final de las negociaciones que sostiene Alcampo con la organización sindical Comisiones Obreras, quienes se mantienen en pie de lucha para que esta situación no escale a despidos masivos, y en caso de que sea una realidad, los empleados tengan un retiro digno y en condiciones óptimas.
3LA TRANSFORMACIÓN PROFUNDA DE ALCAMPO

En la nota Alcampo expresa que han puesto «marcha un plan de ajuste de plantilla, una decisión que aunque difícil, es responsable y necesaria». Además, justifican la medida como un paso para adaptarse a los nuevos hábitos de compra de sus consumidores, que a según la cadena de supermercados «prefieren establecimientos más pequeños, convenientes y adaptados a sus necesidades, Alcampo ha iniciado un proceso de reducción de la superficie de 15 de sus hipermercados».
Del mismo modo, refieren que para elevar la experiencia de compra de los usuarios, comenzarán una transformación y modernización profunda de más de 60 tiendas en toda España. De esta forma, Alcampo busca un restructuración completa, encaminados hacia potenciación de las ventas en línea, un modelo que es más sostenible en cuanto a costes y rentabilidad, lo que representa un verdejo desafío para los trabajadores que estaban adaptados a trabajar en tiendas físicas o no manejan las herramientas digitales con facilidad.