Uno de los casos judiciales del presente curso inicia su andadura y dará que hablar en los medios de comunicación españoles durante un tiempo. Ese caso no es otro que la confirmación de la demanda que presentará del rey emérito, Juan Carlos I, contra el expresidente de Cantabria y secretario general del PRC, Miguel Ángel Revilla, en los juzgados de Madrid tras la fallida conciliación celebrada el pasado viernes en Santander, algo que era de esperar tras las posturas alejadas de ambas partes.
Así lo ha adelantado este martes por la mañana ‘El Diario Montañés’ después de que la conciliación del 16 de mayo concluyera sin avenencia, un acto en el que el emérito no se presentó, aunque si lo hizo sí su abogada, Guadalupe Sánchez, y en el que Revilla no se retractó en sus palabras sobre el monarca, tal y como reclamaba la abogada designada por Juan Carlos I, porque cree que lo que ha dicho es verdad.
«Yo no rectifico en nada de lo que mis condiciones personales me hacen pensar que estoy en lo cierto», afirmó el también diputado regionalista el pasado viernes a la salida de los juzgados de Santander.
Tras no tener éxito la conciliación, el expresidente cántabro ya temía que el emérito, que el mismo día en que no se presentó a la conciliación salió a navegar en el municipio pontevedrés de Sanxenxo, iba a continuar la causa judicial contra él. «Me veo en el banquillo a punto de cumplir 83 años», señaló.
Además de una rectificación pública, Juan Carlos I reclamaba 50.000 euros por manifestaciones injuriosas en programas de televisión al regionalista. Algo a lo que se oponía frontalmente el político cántabro.
La conciliación se celebró en la sala de vistas número 9 del complejo judicial de Las Salesas ante la letrada del Juzgado de Primera Instancia número 13 de la ciudad y duró quince minutos, comenzó a las 10.05 horas y finalizó a las 10.20 sin un acuerdo entre las partes, ya que, como explicó el letrado del regionalista, el catalán José María Fuster-Fabra, en dicho escrito, previo a la interposición de una demanda por injurias y calumnias, se pedía a su cliente que «reconozca que ha mentido» cuando llamó «evasor fiscal» al exjefe del Estado.
Algo que no se puede hacer, según el abogado de Revilla, que ha aseguró que su patrocinado «no mintió». En este sentido, apuntó que si bien su cliente había vertido «opiniones muy críticas» contra el padre del actual Rey de España, lo ha hecho en base a unos hechos que no conoce por sí mismo, sino por diversas informaciones publicadas en «muchos» medios de comunicación.

A LOS TRIBUNALES SIN ACUERDO
En un decreto notificado este martes, la letrada de la Administración de Justicia del Juzgado de Primera Instancia número 13 de Santander declaró terminado sin avenencia el acto de conciliación.
En el documento, la letrada explica que ambas partes asistieron al acto de conciliación celebrado el pasado viernes: el rey emérito por medio de su procurador y de su abogada, y Revilla personalmente y representado y asistido por su procuradora y su abogado, respectivamente.
La resolución indica que, en el acto, «no llegaron a acuerdo alguno ni fue posible avenir» a las partes, por lo que, tal y como recoge la Ley de Jurisdicción Voluntaria, al no lograr ponerlas de acuerdo, «se debe tener el acto por terminado sin avenencia».
Así, la letrada acuerda, por tanto, el archivo definitivo de las actuaciones, si bien cabe la interposición de un recurso de revisión contra el decreto en el plazo de cinco días. En el mismo, el recurrente deberá hacer constar la infracción en que la resolución hubiera incurrido, ha informado el Tribunal Superior de Justicia de Cantabria (TSJC).