Montoya y Anita se han convertido en una de las parejas más queridas por la audiencia de ‘Supervivientes 2025’. Su complicidad, su entrega en las pruebas y su capacidad para emocionar los han hecho destacar en una edición llena de sobresaltos. Pero en la última entrega de Conexión Honduras, ambos protagonizaron uno de los momentos más intensos del programa, pues rompieron a llorar en directo, conmovidos por un giro inesperado que no dependía de ellos.
En una gala donde se habían cebado múltiples momentos, entre esos el supuesto reencuentro de Escassi con Sheila Casas y el prometido Puente de las emociones de Anita, fue otra escena la que se llevó todo el protagonismo. Montoya y Anita, nominados junto a Carmen Alcayde, se enfrentaron a la posibilidad real de que uno de ellos abandonara definitivamente el concurso. La idea de separarse, tras más de ochenta días compartiendo todo, fue lo que terminó rompiendo su fortaleza emocional.
2Un ataque inesperado que removió viejas heridas

El llanto de Montoya y Anita también venía alimentado por un episodio particularmente incómodo vivido esa misma semana. Durante la emisión de un vídeo, Makoke insinuó que Anita podría estar embarazada, provocando la alarma inmediata en la concursante. Lejos de quedarse callada, Anita reaccionó de forma impulsiva revelando que Makoke había roto las reglas del concurso comiendo una chocolatina en los primeros días, en un claro intento de devolver el golpe.
Pero lo más delicado llegó después. Makoke soltó una acusación sin filtros y aseguró que Montoya y Anita habían tenido relaciones sexuales en Playa Misterio durante los primeros días del reality. Esa afirmación provocó una oleada de reacciones. Montoya, visiblemente afectado, no pudo evitar las lágrimas. Anita, por su parte, mostró su enfado pero también aceptó someterse a un test de embarazo para zanjar el asunto, aunque finalmente no se dio más información. La tensión que generó esa acusación terminó de desbordar a ambos, sumando un nuevo peso emocional a una semana que ya estaba marcada por la incertidumbre.