El partido político VOX ha denunciado en los juzgados de Plaza de Castilla a cuatro personas a las que atribuye una reunión mantenida en febrero de este año con el objetivo de obtener información comprometedora contra el teniente coronel de la UCO, que dirige la unidad UAFAC, formado por los investigadores de la Guardia Civil especializados en delitos relacionados con la corrupción.
La reunión, desvelada por el diario El Confidencial, pretendería recabar información para perjudicar a Antonio Balas Dávila, jefe de la Unidad UAFC-UCO de la Guardia Civil.
El partido de Abascal solicita en su denuncia que se investigue a Leire Díez Castro, Javier Pérez Dolset, Alejandro Hamlyn y el abogado Jacobo Teijelo por posibles delitos de cohecho, tráfico de influencias y obstrucción a la Justicia.
La querella se basa en unos audios publicados por El Confidencial, en los que «la exdirectiva socialista Leire Díez, se escuchan frases como «tengo una cosa… con una cosa que te dé (de Balas) ya está, está muerto» o «si se demuestra esto de Balas todo lo demás viene dado»», según un comunicado de Vox, que añade que «Leire Díez y varios empresarios juzgados en tramas como la de hidrocarburos de fraude habrían tratado de obtener documentación incriminatoria contra el coronel Balas a cambio de eventuales beneficios procesales».
CASOS DE LA UCO
Vox subraya en su querella que Balas dirige investigaciones relacionadas con presuntos casos de corrupción vinculados al entorno del presidente del Gobierno, como el conocido Caso Koldo o las diligencias sobre Begoña Gómez, por lo que parece evidente que el «intento de desacreditar a este mando de la Guardia Civil por parte de personas cercanas al PSOE constituye un grave atentado a la independencia judicial y a la integridad de los cuerpos policiales», sigue la nota de Vox.
La querella, firmada por la letrada Marta Castro Fuertes, solicita que se tome declaración a los querellados, se ofrezca personación a Antonio Balas como perjudicado y se admita a Vox como acusación popular en la causa.
Según recoge el escrito, los hechos podrían ser constitutivos de delitos tipificados en los artículos 409 (cohecho), 429 (tráfico de influencias) y 464.2 (obstrucción a la Justicia) del Código Penal.
Esta acción judicial se suma a las más de 20 denuncias y querellas que Vox ha interpuesto contra las distintas tramas de presunta corrupción ligada al presidente del Gobierno a través de su esposa y su hermano y a su equipo ministerial con el ex ministro José Luis Ábalos.
APOYO DE LOS POLICÍAS
Mientras tanto, el sindicato JUPOL, mayoritario en la Policía Nacional , ha trasladado «todo nuestro apoyo y solidaridad a los compañeros de la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil, ejemplo de profesionalidad, compromiso con la ciudadanía y firmeza en la lucha contra la corrupción».
Desde Jupol explican que «en un momento en el que la politización de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado se convierte en una amenaza real para el Estado de Derecho, reivindicamos con más fuerza que nunca la necesidad de unas FFCCSE al servicio exclusivo de la ley y de los ciudadanos, no sometidas a los intereses del poder político de turno».
Y añaden que «luchamos por una Policía Nacional y una Guardia Civil despolitizadas, con plena independencia operativa, y por una Justicia libre de injerencias, bajo el principio de la separación de poderes. Queremos recordar que la actitud del Ministerio del Interior con la Guardia Civil contrasta con la situación que se vive en la Policía Nacional. En los últimos siete años se han producido varios relevos al frente de la Dirección General de la Guardia Civil, mientras que en la Policía Nacional se ha mantenido inalterable la figura del director general, en un ejercicio evidente de control continuado».
Desde Jupol critican que «más grave aún resulta la reciente decisión del Ministerio de prorrogar sine die la edad de jubilación del Director Adjunto Operativo (DAO) a través de un Real Decreto incluido en el paquete de ayudas a la crisis de la DANA, una maniobra que calificamos de auténtica desvergüenza».