Montoya se ha convertido en uno de los concursantes más intensos y emotivos de esta edición de ‘Supervivientes’, y ahora ha vuelto a protagonizar un momento de máxima tensión en los Cayos Cochinos. El de Utrera, visiblemente afectado, rompió a llorar tras sentirse incomprendido y apartado por sus compañeros. Todo comenzó con una polémica sobre el reparto del pescado, cuando Montoya mostró su indignación porque Terelu Campos, según él, había recibido una ración más pequeña que el resto. Pese a que Borja le aclaró que había sido ella misma quien lo había solicitado, Montoya no se dio por satisfecho.
Esta discusión aparentemente menor fue suficiente para que el concursante se sintiera juzgado, ignorado y dolido, al punto de amenazar, una vez más, con abandonar el concurso. “Mis opiniones van al retrete”, dijo, entre lágrimas, visiblemente frustrado porque, según él, nadie quiso darle la razón. Montoya terminó apartándose del grupo, asegurando que no piensa “recoger cable” y que se marchará si hace falta, dejando claro que para él, mostrar sus emociones es parte de su forma de vivir.
3La amenaza de Montoya a ‘Supervivientes’

No es la primera vez que Montoya amenaza con abandonar ‘Supervivientes’, y seguramente no será la última. Su perfil emocional, tan intenso como vulnerable, le ha dado momentos de protagonismo, pero también lo ha colocado en una posición incómoda dentro del grupo. Muchos ya dudan de si sus estallidos son una estrategia o una reacción auténtica a su malestar interno.
Lo cierto es que Montoya no está encontrando su sitio. Se siente aislado, juzgado y poco comprendido. Mientras sus compañeros intentan seguir adelante en la aventura, él parece estancado en un ciclo de frustración y lágrimas del que no logra salir. ¿Podrá reconducir su paso por el programa o volverá a amagar con la salida definitiva? Una vez más, el drama emocional del de Utrera vuelve a ponerlo en el centro del huracán.