La política española vuelve a verse envuelta en un torbellino de acusaciones. La secretaria general del PP, Cuca Gamarra, ha lanzado graves señalamientos contra el PSOE, asegurando que la militante socialista Leire Díez «no actuaba sola» en una presunta conspiración que habría tenido como objetivo a un jefe de la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil y a un fiscal. Para Gamarra, este episodio forma parte de unas «cloacas» y una «obstrucción a la justicia» que, según ella, proceden «de la mano del PSOE».
En una entrevista concedida a ‘Las Mañanas’ de RNE Gamarra se refirió a las informaciones periodísticas que apuntan a que Leire Díez habría ofrecido acuerdos con la Fiscalía y la Abogacía del Estado a empresarios, a cambio de información comprometedora sobre funcionarios públicos. Para la dirigente popular, esta práctica «no es propio de una democracia» y es un claro reflejo de una «decadencia moral».
La degradación moral a la que (Pedro) Sánchez está llevando a nuestro país es ante la que nosotros nos rebelamos», afirmó Gamarra, quien no dudó en recordar un reciente suceso: «La semana pasada vimos cómo el hermano del presidente del Gobierno se va a sentar en el banquillo por un delito de corrupción», un hecho, según ella, sin precedentes.
Según la visión de Gamarra, esta supuesta «corrupción» no solo se ha «estado tapando», sino que ahora se ha desvelado que «se sabía, se tapaba y se obstruía la justicia» para impedir que esta «pueda desarrollar su labor». La secretaria general del PP fue enfática al señalar que «por lo que se está publicando en estos momentos, (Leire Díez) no actuaba ella sola y no parece que sea tampoco como se ha estado insinuando pues un trabajo periodístico», sugiriendo una red más amplia detrás de los hechos.
PRESUNCIÓN DE INOCENCIA
Al ser cuestionada sobre si sus juicios de valor, a falta de una sentencia, quebrantan la presunción de inocencia, Gamarra defendió que este derecho fundamental está «perfectamente garantizado en nuestro país». Apuntó que la única persona que, a su juicio, lo había puesto en entredicho era la vicepresidenta primera y ministra de Hacienda, María Jesús Montero.
No obstante, Gamarra marcó una clara diferencia entre la presunción de inocencia en el ámbito judicial y las responsabilidades políticas. «Claro que existe la presunción de inocencia, solo faltaría en un Estado de derecho, pero las responsabilidades políticas y la degradación moral a la que está llevando Pedro Sánchez a nuestro país es ante lo que nosotros nos revelamos y ante lo que decimos a los españoles que no tienen por qué resignarse», sentenció.
La líder del PP también arremetió contra el PSOE por lo que considera una «persecución a los cuerpos y fuerzas de seguridad», clamando que «a la Policía Nacional y a la Guardia Civil lo que hay que hacer es respetarla». Recordó, además, la existencia de «numerosas evidencias» de cómo se estaría tratando de «obstaculizar la acción de la justicia» en relación con los casos de corrupción que, en sus palabras, «acorralan al presidente del Gobierno»
CRITICAS A LA CONFERENCIA DE PRESIDENTES
En un orden de cosas distinto, Gamarra se refirió a la reciente reunión preparatoria de la Conferencia de Presidentes, celebrada entre el ministro de Política Territorial, Ángel Víctor Torres, y los presidentes autonómicos. Las comunidades autónomas del PP reprocharon al Gobierno no haber atendido sus preocupaciones.
«Las Conferencias de Presidentes no tienen que ser monólogos ni meramente una foto, y eso es lo que pretende el Gobierno», criticó la secretaria general del PP. Gamarra insistió en la necesidad de que estos encuentros sean verdaderos debates donde se aborden los asuntos «con un poquito de profundidad».
La dirigente popular reivindicó algunos de los temas clave que, a juicio de las comunidades autónomas, deberían ser prioritarios: la financiación autonómica, el déficit de profesionales sanitarios, la gestión de las fronteras y la política migratoria. Gamarra lamentó que el Ejecutivo se haya limitado a proponer temas como la vivienda y la formación profesional y universitaria, dejando de lado otras cuestiones de vital importancia para las regiones.
El panorama político se caldea con estas duras acusaciones. Y ahora queda la duda de que si conseguirán estas afirmaciones del PP abrir una investigación profunda sobre las supuestas «cloacas» y la «obstrucción a la justicia» que denuncian.
