El boeuf bourguignon es uno de esos platos que encapsulan la esencia de la cocina francesa tradicional con un toque sabroso y reconfortante, pero además, cocinado con mimo. Originario de la región de Borgoña, este guiso de ternera al vino tinto ha trascendido fronteras gracias a su aroma envolvente y su textura tierna. Cocinarlo en casa no solo es un homenaje a la gastronomía francesa, sino también una forma de trasladarse con los sentidos al corazón de París, sin necesidad de salir de España.
Preparar un boeuf bourguignon como el de los bistrós parisinos no es complicado, pero sí requiere paciencia y cariño. Es un plato que se cocina a fuego lento, dejando que los sabores se desarrollen con tiempo y armonía. Perfecto para un domingo lluvioso o una cena especial, este estofado se convertirá en una receta estrella del recetario casero. A continuación, les enseñaremos cuáles son los ingredientes necesarios y la forma de prepararlo paso a paso.
2Preparación de un boeuf bourguignon perfecto

Para comenzar, se dora la panceta en una cazuela grande hasta que esté crujiente. Se retira y en esa misma grasa se sellan los trozos de carne, previamente salpimentados y pasados ligeramente por harina. Una vez dorados, se reservan junto a la panceta. En esa misma cazuela, se sofríen la cebolla, el ajo y la zanahoria hasta que estén tiernos. Se reincorpora la carne y la panceta, se añade el vino, el caldo y el bouquet garni, y se deja que rompa a hervir.
Una vez ha alcanzado ebullición, se baja el fuego y se cocina todo a fuego muy lento durante al menos dos horas y media, removiendo de vez en cuando y vigilando que no se quede sin líquido. En una sartén aparte, se saltean los champiñones con un poco de aceite hasta que estén dorados, y se incorporan al guiso en la última media hora de cocción. El resultado debe ser una carne que se deshaga al tacto y una salsa densa, brillante y sabrosa. El boeuf bourguignon mejora incluso de un día para otro, por lo que prepararlo con antelación puede ser una buena idea.