El poco poder de la izquierda madrileña comienza a tambalearse, una de las plazas fuertes en del cinturón rojo de la Comunidad de Madrid está en peligro para el PSOE. Alcorcón es la ciudad y su perdida sería un varapalo duro para un partido que cada vez tiene menos poder dentro de la Comunidad de Madrid, que encima ve como Más Madrid sigue siendo la referencia dentro de la izquierda madrileña.
Todo viene tras la salida del Gobierno municipal de Raquel Rodríguez, concejal de Cultura, Festejos y Mayores de Ganar Alcorcón, que ha pasado a no adscrita dentro del consistorio alfarero. Todo ello, tras un duro enfrentamiento con la actual edil socialista de la ciudad, Candelaria Testa, y los propios compañeros de Ganar Alcorcón con los que la ruptura de relaciones no ha sido muy amable y acabó en un duro enfrentamiento dentro de la propia formación.
Con este panorama cabe recordar que el consistorio del Alcorcón está dividido de la siguiente forma: 11 ediles del PP, 8 del PSOE, 4 de Ganar Alcorcón, 2 de Vox y 2 de Más Madrid. Así las cosas, el Gobierno de izquierdas lo componían hasta esta semana 14 ediles; frente a los 13 del PP y Vox.
Algo que genera una circunstancia bastante complicada para lo que queda de legislatura, quedando empatadas ambas partes y dejando la capacidad de elegir a la concejala no adscrita la capacidad de apoyar en cada pleno las propuestas que ella crea convenientes. Dirigir el Ayuntamiento a su gusto, una situación por la cual, al final, Rodriguez puede salirse con sus intenciones.

PROBLEMÁTICA INTERNA EN GANAR A EN GANAR ALCORCÓN
Ganar Alcorcón anunció a principios de semana el cese de Rodríguez, a quien señalan como la principal responsable de la situación actual del partido. La formación progresista acusa a Rodríguez de «deslealtad al actual proyecto», manifestada públicamente en redes sociales y medios de comunicación.
Rodríguez a su vez contesto abandonando el grupo municipal para pasar a ser concejala no adscrita, como hemos comentado ya. «Lo vivido los últimos meses hace que tenga que tomar esta dura decisión», apuntó, insistiendo en que ha sido «una campaña de acoso y derribo» contra su persona. Además, la ex de Ganar Alcorcón comentó que no iba a dejar su cargo a mitad de camino en esta legislatura, argumentando que «queda mucho trabajo por hacer».
Por su parte, desde el Gobierno municipal de coalición remarcaron que se reorganizarán los equipos «para seguir cumpliendo los retos de ciudad que tenemos marcados y en los que coincidimos». Desde el propio Ejecutivo explicaron que se trabaja «desde el consenso y el acuerdo» para garantizar la estabilidad.

TEMOR A UN PACTO CON PP Y VOX PARA SUS «INTERESES PROPIOS»
Pero la salida de Rodriguez era algo temido en la formación localista, a principios de mayo las tensiones se iniciaron cuando cuando desde la Ejecutiva de Ganar Alcorcón se señalo que Rodriguez no había aceptado los resultados de la Asamblea y que «facilitaría a la oposición» formada por PP y Vox un pacto para hacer caer el Gobierno progresista de Alcorcón.
«Nos preocupa seriamente la deriva de Raquel por dinamitar la coalición progresista por el hecho de no aceptar el resultado de una asamblea democrática», dijo David López, quien asumió el liderazgo del partido precisamente en dicha asamblea el pasado 10 de mayo, tras el fallecimiento de Jesús Santos.
Por su parte, tras el fallecimiento de Santos una de las obsesiones de Rodriguez era hacerse con el poder absoluto dentro de ESMASA, la empresa que gestiona los servicios municipales de Alcorcón de la que era accionista y vicepresidenta. Para ello, Rodríguez ha contado con los votos del PP y Vox, logrando a acceder a la presidencia de la empresa municipal de esta forma.
Por este motivo, desde los grupos municipales de izquierdas han señalado que el PP y Vox han roto el pacto anti transfuguismo que existía en la ciudad. Hay que recordar que el objetivo era colocar a David López en ese cargo y Rodríguez lo ha evitado con su voto de calidad, la abstención de los representantes de los trabajadores y el voto de las fuerzas conservadoras.
Con este panorama la alcaldesa socialista ha comenzado a ver que el futuro puede pintar bastante negro para la mitad de la legislatura que todavía queda por cumplirse. Testa intuye que el siguiente puesto en caer puede ser el suyo, algo que puede suponer un duro golpe para el ya menguante poder socialista en la Región de Madrid. Los próximos meses serán decisivos para las aspiraciones de poder de la alcaldesa de Alcorcón.