Incluir alimentos antiinflamatorios en nuestra dieta en un momento en que el estrés, el sedentarismo y los ultraprocesados se han instalado en la vida cotidiana, puede convertirse en una gran opción y la mejor decisión para nuestro bienestar. En este contexto anteriormente mencionado, algunos alimentos están ganando terreno con fuerza, y no es para menos, ya que no solo mejoran la digestión o ayudan a perder peso, sino que también actúan de manera directa sobre uno de los grandes males silenciosos de nuestra época: la inflamación crónica.
La inflamación en el cuerpo es un proceso natural, una respuesta del sistema inmunológico ante agresiones externas. Sin embargo, cuando se vuelve constante, puede derivar en dolencias serias como artritis, enfermedades cardiovasculares o incluso trastornos neurodegenerativos. Por eso, integrar alimentos antiinflamatorios en la dieta diaria es una decisión inteligente, sencilla y profundamente transformadora. A continuación, te contamos cuáles son tres de los más potentes y fáciles de incorporar desde hoy.
2El poder del omega-3

Si hablamos de alimentos antiinflamatorios que benefician al corazón, el cerebro y las articulaciones, el salmón es una estrella indiscutible. Rico en ácidos grasos omega-3, este pescado graso combate de forma directa los procesos inflamatorios en el organismo. Consumir salmón dos veces por semana no solo ayuda a prevenir enfermedades cardiovasculares, sino que también puede reducir el dolor articular en personas con artritis reumatoide.
El secreto está en su perfil nutricional completo, pues además del omega-3, el salmón aporta proteínas de alta calidad, vitamina D y antioxidantes. Cocinado al horno, a la plancha o al vapor, es una opción sabrosa y saludable. Eso sí, mejor si proviene de pesca sostenible o de criaderos responsables. Incluir este tipo de alimentos antiinflamatorios en tu dieta no requiere cambios drásticos, solo un poco de conciencia y planificación.