La polémica con el armamento que tiene su origen en Israel sigue y la ruptura de contratos en materia de Defensa es inminente. En este sentido, la semana pasada se conocieron dos noticias importantes desde el Ministerio que dirige Margarita Robles. Dos nuevas que contradicen seriamente las palabras que la secretaria de estado de Defensa, Amparo Valcárcel, mostró hace escasamente poco más de una semana en un desayuno informativo en Madrid.
Esas noticias no son otras que la rescisión ruptura de los contratos para la compra y trasferencia de tecnología de los misiles Spike LR2 y el Lanzacohetes SILAM, ambos de origen israelí. Que eran vitales para las nuevas mejoras que necesita el Ejercito Español y se encontraban dentro de el Plan Industrial y Tecnológico para la Seguridad y la Defensa que se presentó hace unas semanas.
Un Plan que realmente es la respuesta de España a un contexto internacional marcado por la creciente beligerancia rusa, la aparición de nuevas amenazas híbridas, y el replanteamiento de la alianza atlántica. Supone un reflejo claro de su firme compromiso con la seguridad de la ciudadanía, el progreso tecnológico del país y el avance del proyecto europeo, según comenta el propio Gobierno de Pedro Sánchez.
Hay que recordar que el citado Plan constará de una inversión de 10.471 millones de euros para el año 2025, que permitirá aumentar el gasto total en defensa y alcanzar el objetivo del 2% adquirido ante la Unión Europea y la OTAN. Y los misiles Spike LR2 y Lanzacohetes SILAM eran programas vitales para completar estas mejoras. Y más después de comprobar la utilidad y la necesidad de este tipo de armamento y tecnología en un conflicto como el de Ucrania.
LOS SOCIOS DEL GOBIERNO CLAVE PARA ESTA RUPTURA CON ISRAEL
La clave para todo esto viene desde la presión ejercida por los socios del débil Gobierno de coalición que lidera Pedro Sánchez. Allí, el Ejecutivo depende parlamentariamente para todo de Sumar y Podemos, además del nacionalismo de izquierdas formado por EH Bildu, ERC y BNG. Los cinco partidos pusieron como medida urgente para seguir con la alianza de gobierno la ruptura de relaciones comerciales en materia de Defensa con Israel.
Estos bloques y parte importante de la población se muestran reacios a pagar la invasión de Gaza y los ataques a civiles palestinos con este tipo de comercio, algo bastante loable aunque seguramente cueste un esfuerzo. Aquí llega la contradicción de Defensa, cuando la propia ministra y la secretaria de estado llevan meses declarando que estos programas, al ser anteriores a la invasión israelí de Gaza, no corrían peligro y no serían cancelados, algo que no ha sido así y ha dejado al descubierto a las responsables de la cartera de Defensa. Una cancelación en la que de momento el Gobierno y el Ministerio no han indicado el supuesto coste económico hacia las arcas estatales.
La situación esta tensa, para el Ejército son programas vitales y por ejemplo la falta de los SILAM resta capacidad de fuego y disuasión a nuestro país, especialmente en la frontera sur con Argelia y Marruecos en una preocupante carrera armamentística. Por otro lado, con los Spike LR2 la cosa es peor, tras años intentando convencer a la tropa de su gran utilidad y bondades de un plumazo borran los programas y dejan al descubierto a las defensas anticarro y de los los helicópteros de combate, el jaleo que viene es grande. Ya desde algunos sectores del Ejército se señala que determinadas decisiones políticas ponen en peligro a los soldados y a la operatividad de nuestras tropas.
Como respuesta desde el entorno de Defensa, el Gobierno sigue escondido, se han apresurado a señalar que los programas son vitales y que la rescisión de los contratos no conllevará su cancelación. Se buscarán alternativas para suplantarlos. Fuentes cercanas a Defensa señalan que esas alternativas pueden estar en Estados Unidos Unidos, algo que curiosamente va en contra de la independencia de material estadounidense que desde hace un par de meses se pregona en los pasillos de Moncloa. Otra contradicción.
ALTERNATIVAS FIABLES
Ante la revocación de los Spike LR2, Defensa está explorando varias opciones, principalmente de origen europeo y estadounidense:
- Javelin (Estados Unidos): Es la alternativa más mencionada y considerada como una opción «probada en el campo de batalla». España ya ha utilizado una versión anterior de este misil.
- Misil Moyen Portée (MMP) (Francia – MBDA): Este misil es una solución de última generación europea. Puede ser operado por la infantería o integrado en vehículos blindados, y permite elegir entre control total o «dispara y olvida». Ya lo utilizan Francia, Bélgica y Suecia.
- Next Generation Light Anti-tank Weapon (NLAW) (Reino Unido y Suecia): Es un sistema más ligero y simple, diseñado para ser operado por un solo soldado y apto para el combate urbano.
- TOW 2 (Estados Unidos): España ya utiliza una versión anterior de este misil y la Armada lo mantiene operativo. Puede ser lanzado desde diversas plataformas.
- Panzerfaust 3 (Alemania): Un lanzacohetes alemán potente y portátil.
- MILAN (Turquía/Francia/Alemania): Otro misil anticarro que podría ser una opción.
Según informa Defensa en este sentido, la elección de la alternativa buscará no solo satisfacer las necesidades operativas, sino también garantizar un retorno industrial en territorio nacional. Veremos cual es la opción elegida por Robles y su equipo.
Por otro lado, el mismo Ministerio debe buscar alternativas y una clara reorientación del programa SILAM (Sistema Lanzacohetes de Alta Movilidad). En primer lugar, el Gobierno se plantea el desarrollo con tecnología íntegramente española. Aunque aquí hay que comentar que el programa SILAM en sí no ha sido cancelado, se está buscando la forma de reorientarlo para garantizar su viabilidad sin el apoyo de la industria israelí. Esto implica un esfuerzo por desarrollar o integrar tecnología nacional en el sistema.
Por otro lado, también se puede buscar colaboración con otros países europeos. Y es que es posible que se busquen socios europeos para el desarrollo o la adquisición de componentes y sistemas, con el objetivo de asegurar la soberanía tecnológica y reducir la dependencia de proveedores externos no europeos.
En resumen, el Ministerio de Defensa se encuentra en un proceso de reevaluación y búsqueda de nuevas alianzas para garantizar el equipamiento de sus fuerzas armadas, priorizando la reducción de la dependencia tecnológica y el fomento de la industria de defensa nacional o europea, veremos como acaba todo ante las urgencias.
