‘Supervivientes 2025’ ha cruzado una línea que ha dejado perplejos a miles de telespectadores. En una gala que pretendía ofrecer momentos emocionantes, el reality protagonizó una escena difícil de olvidar: la humillación pública de Anita Williams a cambio de comida y una videollamada con su hijo. Lo que comenzó como una propuesta “divertida” terminó convirtiéndose en uno de los episodios más criticados de toda la edición.
Todo ocurrió cuando Laura Madrueño, en conexión desde Honduras, le ofreció a Anita un trozo de lasaña si aceptaba cortarse 25 centímetros de pelo. La concursante, visiblemente afectada, preguntó entre lágrimas hasta dónde le llegaría el cabello tras el corte. A pesar de su resistencia y súplica de que no fuera por encima de la oreja, la presentadora tomó las tijeras y ejecutó el corte ante una Anita devastada, generando una ola de indignación en redes sociales.
3Anita se convierte en finalista, pero con un alto coste emocional
Paradójicamente, tras el episodio más duro que ha vivido en la isla, Anita recibió una noticia que podría haber sido motivo de alegría, y es que fue salvada por la audiencia. La concursante obtuvo el 45% de los votos, llegando así a convertirse en la segunda finalista de ‘Supervivientes 2025’, acompañando a Montoya en la recta final. Borja, Escassi y Damián siguen en la cuerda floja.
A pesar de esta buena noticia, es evidente que el precio pagado por Anita ha sido alto. La escena del corte de pelo ha dejado una huella emocional en la concursante y también en la imagen del programa. ‘Supervivientes 2025’, lejos de recoger elogios por su gestión del conflicto, ha provocado un tsunami de críticas y ha encendido un debate necesario sobre los límites del espectáculo televisivo.
