El teletrabajo ha supuesto una revolución en la forma de entender la actividad laboral para muchos españoles, pero también ha traído consigo una nueva realidad en cuanto a los gastos que se asumen directamente desde el hogar. Con la oficina instalada en casa, son varios los costes que antes corrían por cuenta de la empresa y que ahora, en muchos casos, recaen sobre el bolsillo del trabajador, aunque no siempre se es consciente de que una parte de ellos podrían ser deducibles. Conocer estas posibilidades es fundamental para no pagar de más y optimizar la declaración de la renta.
La Agencia Tributaria contempla ciertos supuestos en los que los trabajadores por cuenta propia, y en algunos casos específicos también los asalariados bajo acuerdos concretos con sus empresas, pueden desgravarse una porción de esos gastos domésticos directamente vinculados a su actividad profesional. Identificar correctamente cuáles son estos desembolsos y cómo justificarlos adecuadamente es el primer paso, para aliviar la carga fiscal y recuperar una parte de lo invertido en el desarrollo del trabajo desde el domicilio particular. Se trata de una información valiosa que puede suponer un ahorro considerable al final del ejercicio fiscal.
3EL ESPACIO DE TRABAJO EN CASA: AMORTIZACIÓN Y OTROS GASTOS DEL INMUEBLE

Cuando se destina una parte de la vivienda habitual al desarrollo de la actividad profesional, no solo los suministros son deducibles; también pueden serlo otros gastos relacionados con el propio inmueble. Aquí entran en juego conceptos como la amortización de la vivienda, los intereses de la hipoteca si la hubiera, el Impuesto sobre Bienes Inmuebles (IBI) o la tasa de basuras, siempre en la proporción de la vivienda que esté efectivamente afecta a la actividad económica del autónomo. Este es uno de los puntos que más dudas suele generar, pero también uno de los que mayor ahorro puede suponer.
Para calcular la parte deducible de estos gastos inmobiliarios, se utiliza el criterio de los metros cuadrados. Se debe determinar qué porcentaje de la superficie total de la vivienda se utiliza exclusivamente para el trabajo y aplicar ese mismo porcentaje a los gastos mencionados. Es importante recordar que esta afectación debe estar correctamente comunicada a la Agencia Tributaria mediante el modelo 036 o 037, ya que es un requisito indispensable para poder aplicar estas deducciones sin problemas en caso de una revisión fiscal. Un cálculo preciso y una correcta declaración son fundamentales.