Las olas de calor ya no son un fenómeno excepcional, sino que se han convertido en parte del paisaje habitual de los veranos en España, donde las temperaturas extremas se mantienen durante días o incluso semanas. En 2023, nuestro país fue el segundo de Europa con más muertes relacionadas con el calor, una realidad que pone de manifiesto la urgencia de tomar precauciones. Pero mientras los humanos buscamos refugio en la sombra o el aire acondicionado, muchas veces olvidamos que nuestras mascotas también sufren, y en muchos casos, con más intensidad.
Las olas de calor no solo agotan a quienes caminamos por la calle o pasamos horas bajo el sol, también pueden causar estragos en perros y gatos. Estos animales no regulan su temperatura como nosotros, y su exposición a ambientes calurosos puede derivar en consecuencias tan graves como un golpe de calor. Por eso, es fundamental entender cómo se manifiesta el malestar en ellos y qué medidas de prevención debemos adoptar durante los días más calurosos del año.
2Cómo proteger a tu mascota durante las olas de calor

En medio de una ola de calor, la prevención es clave. Nunca dejes a tu mascota dentro de un coche, aunque esté a la sombra o con las ventanas abiertas, pues en pocos minutos la temperatura interior puede superar los 50 °C. Igualmente importante es asegurarte de que tengan acceso constante a sombra y agua fresca, renovada varias veces al día. Si están al aire libre, procura que el espacio esté bien ventilado.
Evita también los paseos durante las horas centrales del día. El asfalto caliente puede provocar quemaduras en las almohadillas, por lo que es mejor salir temprano por la mañana o al caer la tarde. Y si no puedes evitar salir, haz la prueba del suelo con el dorso de la mano: si tú no aguantas cinco segundos, tampoco lo harán ellos. Las olas de calor son una amenaza seria, pero tomando precauciones simples, pueden manejarse con seguridad.