Sevilla es una ciudad que guarda un rincón secreto que sirve como un imán para los solteros que se encuentran en busca del amor correspondido. Con esto no me refiero a que se trate de un bar o de una aplicación de citas a ciegas, se trata de Burgos, un lugar aún más fascinante y que está vinculado a una historia que puede cambiar la vida de quien se atreva a aceptar el reto de la iglesia de San Pedro Apóstol.
El reto consiste en encontrar un pajarito oculto en la pintura de un azulejo que se encuentra en la fachada de la iglesia de San Pedro Apóstol y el cual fue pintado por el artista Juan Oliver en 1960. Este retablo de «Las Ánimas del Purgatorio», contiene una promesa inscrita para todos los solteros que logren conseguir un pajarito oculto en la pintura luego de realizar una limosna y hacer una oración. Según la leyenda, es una forma mística de conseguir el amor sin muchas complicaciones
3LA IMPORTANCIA DE REZAR CON FE
En una sociedad donde el gesto de ofrecer una limosna es un acto que debe ser genuino y sin esperar nada a cambio, en el caso del reto turístico que esconde Sevilla, no se trata nada más de dar unas monedas por darlas, sino que se trata de ofrecer algo más valioso y es la oración. Este momento de fe es lo que hace más significativo este reto.
Al rezar, no solo estarías conectando con la ayuda divina para encontrar un tesoro intangible, sino que va más allá de lo físico y que ayudan a establecer una conexión con tu yo interno. Este reto turístico es un acto que debe ser realizado con paciencia y fe. Se dice que hay parejas que hacen la prueba y si ambos consiguen el pajarito, es que están en la relación correcta, pero si alguno no lo encuentra, es probable que deban revisar sus prioridades. Ojo con esto no quiero decir que la pintura de Oliver sea una máquina para encontrar el amor o detectar infieles, esto se trata de cómo se encuentran organizados los sentimientos.
