El lanzamiento de un nuevo visado digital para nómadas digitales siempre capta la atención, y la reciente iniciativa de Croacia en este sentido no es una excepción. Este movimiento estratégico no solo busca atraer a una comunidad global de trabajadores remotos, sino que también se perfila como un desafío directo a destinos ya consolidados, especialmente a Portugal, que ha sido durante años un imán para este colectivo.
En un mercado cada vez más competitivo por el talento global y la inversión indirecta que generan los trabajadores remotos, los países buscan ofrecer marcos legales atractivos que faciliten estancias largas y productivas. La propuesta croata, efectiva desde 2024, abre una nueva vía en el Adriático, prometiendo un entorno favorable para quienes desean combinar la flexibilidad laboral con un estilo de vida diferente, posicionándose con fuerza en el radar internacional de quienes viven y trabajan sin ataduras geográficas fijas.
2EL MECANISMO DEL VISADO DIGITAL CROATA: REQUISITOS Y VENTAJAS
El funcionamiento del visado para nómadas digitales en Croacia se basa en un permiso de residencia temporal, diseñado específicamente para ciudadanos de terceros países que no pertenecen al Espacio Económico Europeo pero que trabajan de forma remota para empresas o clientes fuera de Croacia. Los requisitos suelen incluir demostrar ingresos suficientes, tener seguro médico, no contar con antecedentes penales y, fundamentalmente, probar que la actividad laboral se realiza íntegramente fuera del territorio croata, lo que garantiza que no se compite en el mercado laboral local ni se desplaza a trabajadores croatas.
Una de las principales ventajas que ofrece este visado digital es la exención de impuestos sobre la renta en Croacia, un factor extremadamente atractivo para muchos nómadas que de otro modo tendrían que navegar por complejas normativas fiscales de doble imposición o pagar impuestos en múltiples jurisdicciones. Esta exención, aunque con ciertas condiciones y por un tiempo limitado (típicamente un año, renovable), simplifica enormemente la vida administrativa y económica de los trabajadores remotos, haciendo de Croacia una opción fiscalmente eficiente en comparación con otros países que sí gravan los ingresos de los nómadas digitales desde el primer día de residencia fiscal.
