Laura Moure se ha convertido en una figura indispensable de las sobremesas televisivas gracias a su participación en ‘La Ruleta de la Suerte’, uno de los concursos más longevos y exitosos de la televisión española. Su rostro amable y su agilidad al destapar letras han conquistado a millones de espectadores cada día, pero pocos conocían hasta ahora los entresijos de su trabajo. En una reciente entrevista en el programa ‘Y ahora Sonsoles’, la copresentadora sorprendió al público revelando algunos secretos del set y de la mecánica del concurso que comparte con Jorge Fernández.
Con la naturalidad que la caracteriza, Laura Moure habló sobre aspectos técnicos que muchos creían evidentes, pero que resultaron ser muy distintos de lo que aparentan en pantalla. La charla no solo permitió descubrir el esfuerzo que hay detrás de cada emisión, sino también entender mejor el rol fundamental que cumple Moure, quien va más allá de ser una simple asistente de plató. Su complicidad con Jorge Fernández y su conexión con el público explican en parte el éxito sostenido del programa durante más de veinte años.
2Laura Moure revela el ritmo de trabajo en el plató

Otra de las sorpresas que Laura Moure compartió en la entrevista fue el ritmo con el que se graban los episodios. A diferencia de lo que algunos podrían pensar, el equipo de ‘La Ruleta de la Suerte’ graba tres programas al día, cada uno con una duración aproximada de una hora y media. Moure comentó que su jornada empieza entre las ocho y media y las nueve de la mañana y suele terminar alrededor de las tres de la tarde. Un horario intenso, pero bien organizado, que permite mantener un flujo constante de contenido sin perder calidad.
Laura Moure también explicó que los programas no se emiten inmediatamente después de grabarse. “Depende. No hay una regla exacta”, señaló, añadiendo que a veces pueden pasar hasta dos meses entre la grabación y la emisión. Esta información revela lo meticulosa que es la planificación de un programa que lleva más de 60 meses consecutivos como líder de su franja horaria, y cuya estabilidad se debe, en gran parte, a la profesionalidad de todos los que lo hacen posible.