El error en la factura de la luz que te puede estar costando 100€ al año y que puedes cambiar con una llamada es una realidad para miles de hogares en España. Muchos consumidores pagan mes a mes un sobrecoste innecesario, un gasto fijo que se cuela en el recibo sin que la mayoría sea consciente de su origen o de cómo atajarlo, y que engorda el importe final de manera silenciosa pero constante. Este desembolso fantasma no tiene que ver con el consumo de energía, sino con un aspecto técnico del contrato que, afortunadamente, tiene una solución más sencilla de lo que parece y no requiere de obras ni de cambios drásticos en nuestros hábitos cotidianos.
El quid de la cuestión reside en un concepto que todos vemos pero pocos entienden por completo. La solución no requiere de complicadas gestiones ni de conocimientos técnicos avanzados, sino de una simple revisión de uno de los conceptos fijos del contrato eléctrico, una gestión que está al alcance de cualquiera y que puede realizarse con una única llamada telefónica. Entender este pequeño detalle y actuar en consecuencia puede suponer un alivio considerable para el bolsillo a final de año, optimizando un contrato que, en muchos casos, está desactualizado y no se corresponde con las necesidades reales de la vivienda y sus ocupantes actuales.
2LA CALCULADORA QUE TE AHORRA UN DINERAL: DESCUBRE CUÁNTA POTENCIA NECESITAS REALMENTE

Afortunadamente, la tecnología y las organizaciones de consumidores han puesto a nuestro alcance herramientas increíblemente útiles para arrojar luz sobre esta cuestión. La Organización de Consumidores y Usuarios (OCU), por ejemplo, ofrece calculadoras online gratuitas que permiten a cualquier persona determinar la potencia óptima para su vivienda. Estas aplicaciones son muy intuitivas, solo requieren que el usuario introduzca los electrodomésticos que posee y estime la frecuencia de su uso simultáneo, para ofrecer una cifra ajustada y realista de los kilovatios (kW) que realmente demanda su estilo de vida y que deberían figurar en su contrato.
Utilizar estos simuladores es el primer paso para tomar el control y dejar de pagar de más en la factura de la luz. El resultado que proporcionan no es una estimación vaga, sino un cálculo fundamentado en los consumos estándar de los aparatos y en la lógica de uso de un hogar medio, lo que nos da un argumento sólido y datos concretos para presentar ante nuestra compañía eléctrica. Este simple ejercicio de apenas unos minutos nos empodera como consumidores, permitiéndonos pasar de ser sujetos pasivos que simplemente abonan un recibo a ser gestores activos de nuestro propio gasto energético.