Dos mujeres acaban de entrar en el listado de los terroristas «Most Wanted» o más buscados por el Federal Bureau Investigation (FBI). Las mujeres son Joanne Chesimard y Ahlam Ahmad Al-Tamimi. Por la primera el FBI ofrece una recompensa de 1 millón de dólares y por la segunda eleva el precio hasta los 5 millones de dólares americanos.
Ambas comparten cartel con otros 21 presuntos terroristas, acusados de delitos federales en Estados Unidos, como se indica en sus carteles de búsqueda. Los cargos pendientes que figuran en los carteles permiten su arresto y comparecencia ante la justicia. El FBI advierte que además podrían presentarse cargos en el futuro a medida que avancen diversas investigaciones relacionadas con otros incidentes terroristas, por ejemplo, los atentados del 11 de septiembre de 2001.
El programa «Recompensas por la Justicia», administrado por la Oficina de Seguridad Diplomática del Departamento de Estado de los Estados Unidos, ofrece recompensas por información que conduzca al arresto de muchos de estos terroristas. También es importante señalar que estas personas seguirán siendo buscadas en relación con sus presuntos delitos hasta que se retiren los cargos o se obtenga evidencia física creíble que demuestre con 100% de precisión que están fallecidas.
En el caso de Joanne Chesimard ofrecen un millón de dólares de recompensa y explican que es posible que esta mujer «use una variedad de estilos de peinados y se vista con ropa tribal africana».
EL FBI LA BUSCA DESDE 1979
Se busca a Joanne Chesimard por fugarse de una prisión en Clinton, Nueva Jersey, mientras cumplía cadena perpetua por un asesinato. El 2 de mayo de 1973 dos agentes de la Policía del Estado de Nueva Jersey detuvieron a Chesimard, quien formaba parte de una organización revolucionaria extremista conocida como el Black Liberation Army, junto con dos cómplices después de que cometieran una infracción de tráfico en la autopista de peaje de Nueva Jersey.

Ya entonces se buscaba a Chesimard por estar involucrada en varios crímenes que incluían atracos a bancos. Chesimard y sus cómplices abrieron fuego sobre los agentes. Un agente resultó herido y al otro agente le dispararon y lo ejecutaron a quemarropa. Chesimard huyó del lugar pero fue apresada posteriormente.
Uno de sus cómplices resultó muerto en el tiroteo y el otro también fue apresado y continúa encarcelado. En 1977 Chesimard fue hallada culpable de asesinato en primer grado, de agresión y de causar lesiones a un agente de la policía, de agresión con un arma peligrosa, de agresión con el propósito de matar, de tenencia ilícita de un arma, y de atraco a mano armada. Fue condenada a cadena perpetua.
Pero el 2 de noviembre de 1979 Chesimard se fugó de la prisión y se fue a vivir clandestinamente antes de que la localizaran en Cuba en 1984. Se piensa que aún se encuentra viviendo en Cuba.
En el caso de Ahlam Ahmad Al-Tamimi, está acusada de «conspirar para usar y utilizar un arma de destrucción masiva contra un ciudadano estadounidense fuera de los Estados Unidos con resultado de muerte y ayudar, instigar y provocar que se cometa un acto de terrorismo».

Ahlam Ahmad es una periodista jordana acusada de participar en un ataque suicida con bomba el 9 de agosto de 2001 en una pizzería en la ciudad israelí de Jerusalén, que mató a 16 personas entre las que había 3 ciudadanos de Estados Unidos. Otros 3 americanos resultaron heridos entre las 122 personas afectadas por la explosión. El 15 de julio de 2013 el Tribunal de Distrito de Columbia en Washington DC dictó una orden de arresto contra ella.
El FBI la considera armada y muy peligrosa, habla árabe e inglés perfectamente, y el FBI ofrece 5 millones de dólares de recompensa por su paradero.