El PSOE ha mandado al Tribunal Supremo el detalle de las transferencias dinerarias y aportaciones del PSOE a José Luis Ábalos entre 2014 y 2024. Lo ha hecho mediante dos pendrive que contienen dos archivos excel. En el primero de estos archivos resume las retribuciones y aportaciones, mientras que el segundo desglosa conceptos específicos. Lo hace todo en tres partidas, que no llega a sumar. En total, Ábalos ingresó en neto entre enero de 2014 y febrero de 2024 la cantidad de 549.148,04 euros. Es decir, eso es lo que ingresaba en sus cuentas corrientes una vez retenido el IRPF correspondiente, las aportaciones al PSOE y el pago de la cuota de afiliado.
Desde 2014 a 2024, el PSOE realizó transferencias a Ábalos por su condición de Diputado, miembro de la Dirección y de la Comisión Ejecutiva del PSOE. Las retribuciones se transferían netas, después de retenciones fiscales, y se deducían las aportaciones al partido.
El PSOE intenta que no haya el menor asomo o duda de sospecha sobre su financiación y detalla los números entregados al Alto Tribunal de manera exhaustiva. Las cuentas recogen que pagó a Ábalos 563.519,39 euros brutos del Congreso de los Diputados, pero el sueldo se ingresaba en el partido y luego se le ingresaba a Ábalos tras las deducciones correspondientes, en concreto, 524.722,46 euros.
Por ejercer la dirección del grupo socialista en el Congreso de los Diputados, Ábalos cobró 30.474,98 euros que se quedaron en 19.068,71 euros una vez practicadas las retenciones correspondientes. Como miembro de la Ejecutiva socialista, Ábalos cobró 6.704,27 euros que se quedaron en 4.357,17 tras retenciones.
DONACIÓN DE ÁBALOS
Las cuentas reflejan que el ex ministro incluso realizó una donación de 20 euros en una sola ocasión a una asociación benéfica. En los números llama la atención que en 10 años la cuota de afiliación costase 972 euros nada más y que las aportaciones «voluntarias» al PSOE como cargo público fuesen de 5.111,36 euros. Por gastos Ábalos recibió 38.231,61 euros.
Los datos fueron solicitados por el Tribunal Supremo hace días para que la UCO pudiese cotejarlos con los obtenidos de las cuentas bancarias del ex ministro. Se trataría de comprobar si los ingresos de Ábalos se corresponden a su sueldo.
En el escrito enviado por el PSOE el abogado de la formación política dice que «el PSOE se somete anualmente desde el ejercicio 2020 a una auditoría de cuentas externa que es realizada por una firma independiente (…) sin que conste, a fecha de remisión de la contestación a este requerimiento, ninguna salvedad sobre lo aquí descrito».
Añade el abogado del PSOE que «las cuentas del partido son sometidas al escrutinio del Tribunal de Cuentas, como supremo órgano fiscalizador de las cuentas de los partidos políticos» y luego termina con un dato cuando menos inquietante porque dice que «el Tribunal no ha constatado hasta el 2020, último ejercicio fiscalizado, ninguna irregularidad en el sistema de gestión de las asignaciones económicas de los parlamentarios ni en las aportaciones comprometidas por los cargos del PSOE».
En definitiva, que el Tribunal de Cuentas no fiscaliza al PSOE (se desconoce si a otro partidos tampoco) desde el año 2020.
El escrito termina poniéndose «a plena disposición del Tribunal para aclarar cualquier aspecto, ofrecer información adicional o colaborar en cualquier otro aspecto que la autoridad judicial considere necesario».