sábado, 26 julio 2025

El error con la tarjeta de la ITV que te puede impedir vender tu coche

Superar la Inspección Técnica de Vehículos es, para la mayoría de los conductores, un trámite periódico más, a veces molesto, pero necesario para circular con la tranquilidad de que todo está en orden y con la preciada pegatina adornando el parabrisas. Sin embargo, lo que muchos desconocen es que el verdadero valor de esta revisión no reside únicamente en el resultado inmediato, sino en el rastro digital que deja en los registros de la Dirección General de Tráfico. Un simple suspenso, una ‘ITV desfavorable‘ que no se subsana correctamente, puede convertirse en una pesadilla burocrática, una marca invisible que emerge en el peor momento posible: cuando intentamos vender nuestro coche. Esta situación genera un bloqueo administrativo que frena en seco la operación, dejando a vendedor y comprador en un limbo inesperado y frustrante, todo por un fallo que quizás consideramos menor en su día.

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La creencia popular de que una vez pasado el mal trago de la inspección, con sus defectos leves o graves, el problema queda zanjado hasta el año siguiente, es un error de bulto que puede costar muy caro. La realidad es que el sistema actual es mucho más riguroso y está interconectado, lo que significa que un resultado desfavorable no es una simple recomendación para visitar el taller. Es una orden directa con consecuencias legales y administrativas muy serias si se ignora, una anotación en el historial del vehículo que actúa como una cicatriz imborrable hasta que se demuestre su completa sanación, es decir, hasta que se superen las pruebas en una nueva visita a la estación. Este detalle, a menudo subestimado, es la clave de un problema que afecta a miles de transacciones de vehículos de segunda mano en España cada año.

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¿CÓMO LIMPIAR EL HISTORIAL? EL CAMINO OBLIGATORIO PARA PASAR LA ITV

Fuente: Freepik

Afortunadamente, este bloqueo administrativo no es una condena perpetua para el vehículo, pero su solución es única e innegociable. Para poder eliminar la anotación y desbloquear la transferencia, el propietario debe hacer exactamente lo que debió hacer en su momento: reparar todos y cada uno de los defectos graves que fueron señalados en el informe de la inspección. No existen atajos, ni recursos administrativos, ni forma de eludir este paso, es imprescindible acudir a un taller mecánico para que ponga el vehículo en condiciones óptimas de seguridad, abordando problemas comunes como un sistema de frenado deficiente, emisiones contaminantes por encima de lo permitido, fallos en la dirección, neumáticos en mal estado o problemas en el alumbrado.

Una vez realizadas las reparaciones, el siguiente paso es volver a presentar el vehículo a la inspección técnica. Lo habitual es hacerlo en la misma estación que emitió el informe desfavorable, ya que solo comprobarán los puntos que fallaron. Si se acude a una estación diferente, esta realizará una inspección completa de nuevo. Solo cuando el resultado sea ‘favorable’, la propia estación se encargará de comunicarlo telemáticamente a la DGT para que la anotación negativa sea eliminada del historial, dejando el vehículo «limpio» y apto para ser transferido sin ningún impedimento. Este proceso demuestra que pasar la ITV no es solo un trámite, sino una responsabilidad activa del propietario.

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