La conversación tiene lugar el 9 de abril de 2019 en el despacho oficial del ministro José Luis Ábalos. Su asesor, Koldo García, llevaba una grabadora encima siempre y todas las conversaciones, de diferente naturaleza, quedaban siempre grabadas. Ese día se hablaban de muchas cuestiones en el despacho de Ábalos y entre otras, de Venezuela, la oposición y el negocio del petróleo venezolano. «Te quedaría medio (millón) al mes», le dijo Koldo a Ábalos en un momento de la conversación a lo que el ex ministro replicó: «Que lo pongan en un contrato».
Koldo (K): Ayer estuve tomando un café con un representante de un partido de Venezuela, ya te pasaré el nombre. Quería tomarse un café contigo. Es el homólogo allí de Exteriores, uno con gafitas, que es amigo de «Marfur». Hablaron con ellos, les recibieron en Moncloa, estaban encantado. ¿Cómo se llama el presidente de Venezuela?
Ábalos (A): Maduro.
K: No, el otro.
A: (Juan) Guaidó.
K: Guaidó está sumamente agradecido porque te estuviste esforzando y todo lo demás. Y se han puesto un contacto, para que una empresa petrolera supervisada por Estados Unidos, porque les han quitado el control en Estados Unidos a Maduro y han puesto a gente de Guaidó. Y el intermediario va a ser Gonzalo (Aldama) durante 3 años.
Y sigue Koldo explicando.
K: Es uno al mes, lo que hacen esos céntimos y demás… y simplemente Gonzalo ha sido el intermediario. Entonces, no hace nada, simplemente ha sido de intermediario, es decir, gracias a ti, que tu les has recibido
A: Vale.
KOLDO INSISTE EN LA MEDIACIÓN
K: Que tú les has recibido. Y que tú les has dado pie para que puedan ser reconocidos en el Gobierno de España. Porque piensan que lo has hecho tú todo y dicen, el intermedio… ya está todo hecho, no hay nada que hacer, ya está hecho… Dicen a ver si puedes conseguir que se pueda llamar, que hable Guaidó con el presidente nuestro, con Pedro (Sánchez).
A: ¿Para qué?
K: Solamente le quiere dar la gracia porque tiene a 200.000 españoles en Venezuela, que están con las mismas necesidades y urgentes que los venezolanos. Porque están totalmente tirados. Entonces, a ver si tú puedes conseguir que hable con Guaidó por teléfono para ver qué pueden hacer, qué tipo de ayuda puede mandar desde España para esos 200.000 españoles.
A: Mmmm
K: Escúchame, hay dos empresas que están llevándose desde Venezuela. Como va todo de puta madre generan uno (1 millón de euros). Y tú estás ahí. Ya está trabajado. Ya está dicho. En agradecimiento por todo lo que se ha hecho. Yo digo esto es la mitad tú y se acabó y cuando se firme esto es tuyo. En cuanto firmen con la petrolera, de uno… la mitad es tuyo (500.000€). Firman un contrato para suministrar un petrolero todos los meses llevando… bruto, petróleo que es para refinar. Ese contrato se lo van a firmar ya este mes para suministrar a la empresa CITGO, a una empresa de Venezuela… pues el intermediario es Gonzalo (Aldama). Y esos céntimos que quedan aparte, unos cinco céntimos de dólar, genera un beneficio de 9 dólares, cada barril cuesta 50 dólares…
A: Jajajaja.
K: Firman un contrato una compañía de Venezuela y una compañía de Estados Unidos para suministrar el crudo. Es una empresa pública de Venezuela que el control se lo dieron a la gente de Guaidó. Entonces estos de Guaidó han dicho, oye, conoces a alguien… porque él (Aldama) buscó los contactos
A: Pero vamos, a ver, porque yo como que me he liado… me va a quedar…
K: Sí, exacto, medio al mes durante tres años.
A: Ahora explícame porque yo no tengo claro.
K: Porque éste se queda uno (Aldama) y yo digo esto es mio, medio a mi, ¿por qué? Este otro se queda uno, no, se queda medio.
A: Asegúralo en un contrato.
Estos hechos hacen recordar el caso de la vicepresidenta venezolana Delcy Rodríguez, quien visitó España en enero de 2020, unos meses después de esa conversación. Según las declaraciones del empresario Víctor Gonzalo de Aldama en la Audiencia Nacional, la visita de Rodríguez fue organizada por miembros del Gobierno a pesar de las sanciones de la Unión Europea.
Según sus palabras, el propio Pedro Sánchez parecía haber estado al tanto de la visita y de las negociaciones. Esta visita incluía cenas y reuniones con Delcy Rodríguez, a pesar de la controversia por su inclusión en las listas negras de la UE.
El hecho de que los audios revelen cómo Koldo García, con la complicidad de Ábalos, intentaba facilitar el contacto entre Guaidó y Sánchez como recompensa para concretar un acuerdo petrolero pone en duda la legalidad de ese tipo de negocios.