El Partido Popular está experimentando un viraje significativo en su estrategia de alianzas políticas. Bajo el impulso de su nuevo secretario general, Miguel Tellado, Génova ha intensificado su acercamiento a Junts per Catalunya al tiempo que se aleja del Partido Nacionalista Vasco (PNV). Esta evolución responde tanto a cálculos parlamentarios como a movimientos internos que reflejan una redefinición del mapa de aliados preferentes del PP.
Uno de los episodios más reveladores de esta tendencia tuvo lugar durante el último Congreso Nacional del PP, cuando el líder de los populares catalanes, Alejandro Fernández, presentó una enmienda destinada a consolidar una línea dura contra Junts. El texto sugería una exclusión explícita de cualquier posibilidad de acuerdo con la formación heredera de Convergència Democràtica de Catalunya.
Sin embargo, Génova 13 intervino directamente para retirar dicha enmienda, evitando así un mensaje de veto que dificultara futuros contactos con los neoconvergentes. Esta maniobra, auspiciada por la dirección nacional, evidencia la voluntad de no cerrar puertas a una eventual entente con el partido de Carles Puigdemont.
LOS MEDIOS CERCANOS AL PP CAMBIAN EL TONO HACIA JUNTS PER CATALUNYA
El cambio de tono también se percibe en el ecosistema mediático afín al PP. La reciente entrevista publicada en La Razón, que es uno de los diarios más cercanos ideológicamente a la formación conservadora, al abogado de Puigdemont, Gonzalo Boyé, ha sido leída como un gesto significativo.
En ella, Boyé no solo expone con claridad la estrategia jurídica del expresident, sino que recibe un tratamiento inusualmente favorable para una figura tradicionalmente demonizada por la derecha española. Este gesto editorial parece buscar una desestigmatización paulatina de Junts ante la opinión pública conservadora.

En paralelo, Miguel Tellado ha adoptado un tono cada vez más hostil hacia el PNV, en particular hacia su portavoz en el Congreso, Aitor Esteban. Tellado acusa a Esteban de mantener una cercanía sospechosa con Antxon Alonso, uno de los nombres mencionados en el llamado ‘caso Koldo’, que investiga una supuesta trama de corrupción relacionada con la gestión de contratos públicos durante la pandemia.
Aunque el PNV ha negado reiteradamente cualquier vínculo con Alonso, Tellado ha intensificado sus ataques, reforzando así la ruptura progresiva entre los dos partidos.
ESTRATEGIA PROMOVIDA POR MIGUEL TELLADO
La estrategia de Tellado no es únicamente discursiva. En el Congreso, el PP ha comenzado a modificar su geometría variable, priorizando alianzas tácticas con Junts en temas económicos mientras se enfría el contacto con los jeltzales.
Esta agitación política se produce mientras varios altos cargos del PP se enfrentan a acusaciones de haber falsificado sus expedientes académicos. El caso más reciente involucra a la diputada madrileña Noelia Núñez, quien ha sido señalada por inconsistencias en su currículum.
La controversia ha salpicado también al presidente del Senado, Pedro Rollán, a la polémica número 3 del PP madrileño Ana Millán y al líder del PP en Navarra, Javier García. Si bien Génova ha intentado cerrar filas en torno a sus dirigentes, el escándalo ha debilitado la imagen del partido en un momento delicado, con varios frentes judiciales abiertos y una opinión pública especialmente crítica con la clase política.

El liderazgo de Alberto Núñez Feijóo, aunque reforzado en algunos sondeos, enfrenta así una prueba de fuego. La decisión de mantener abiertos los canales con Junts podría facilitar futuros acuerdos legislativos, pero también implica tensiones internas y el riesgo de erosionar la coherencia ideológica del partido.
Por otro lado, el deterioro del vínculo con el PNV podría tener consecuencias en el futuro.