El verano de 2025 se ha convertido en una pesadilla para España. Los incendios forestales, avivados por una ola de calor sin precedentes, han cobrado la vida de dos personas en apenas unos días, sumiendo al país en una situación de emergencia que parece asfixiar a las instituciones.
La primera víctima fue un hombre en Tres Cantos, Madrid, que falleció a causa de las quemaduras. La segunda, un voluntario de 35 años que perdió la vida mientras luchaba contra las llamas en Molezuelas de la Carballeda, León. Estas muertes son la cara más trágica de una situación que ha puesto a prueba la capacidad de respuesta de las administraciones, tanto a nivel autonómico como nacional.
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha expresado su consternación y ha señalado que la situación con los incendios en España «sigue siendo grave» y ha instado a «extremar la precaución». «La situación de los incendios sigue siendo grave. Extremar la precaución es esencial», ha indicado a través de un mensaje en la red social ‘X’. Al margen de ello, ha agradecido a los equipos de emergencia desplegados para las tareas de extinción. «Gracias, una vez más, a quienes trabajáis sin descanso para combatir las llamas», ha asegurado.

PREOCUPACIÓN EN INTERIOR
Mientras que el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, ha mostrado su preocupación por la creciente cifra de detenidos por presunta autoría de los fuegos. En total, hay 25 personas detenidas en relación con estos sucesos, muchos de ellos provocados.
En referencia a esto, Marlaska ha asegurado que le «preocupa» que 25 personas hayan sido detenidas en España desde el inicio del verano como presuntas autoras de incendios forestales. Así lo ha manifestado este miércoles en una entrevista en ‘El Mon a Rac 1’, recogida por Europa Press, donde ha confirmado que «un número importante de ellos son provocados», mientras que otros se producen por imprudencias.
El ministro ha asegurado que España cuenta con medios autonómicos y estatales y que es un «referente» europeo en la extinción de incendios, pero que se ha abierto una «petición de ayuda, de colaboración, dentro del marco de la Unión Europea, del Mecanismo de Protección Civil de la Unión Europea» para atajar la que ha descrito como una situación de multiplicidad y absolutamente compleja.

UN AGOSTO DE RÉCORD Y UN FUTURO INCIERTO
La Agencia Estatal de Meteorología (AEMET) ha confirmado que no existen precedentes de un periodo tan cálido como el que se está viviendo entre el 1 y el 20 de agosto de 2025, solo comparable al de 2003. La ola de calor, que ha golpeado a España durante casi todo el mes, ha provocado temperaturas récord en varios puntos del país, como los 41,2ºC en Zamora y los 41,9ºC en Lleida.
A pesar de un breve respiro térmico, la AEMET advierte que la ola de calor podría prolongarse hasta, al menos, el lunes 18 de agosto, lo que augura un panorama poco halagüeño para la extinción de los 14 incendios forestales que se mantienen activos.
Para hacer frente a la situación, el Gobierno ha declarado la fase de preemergencia en nivel 1 y ha movilizado a 1.000 miembros de la Unidad Militar de Emergencias (UME), 5.000 agentes de la Guardia Civil y una ingente cantidad de medios estatales y autonómicos. A pesar de los esfuerzos, la complejidad de la situación ha obligado a España a solicitar ayuda a la Unión Europea a través del Mecanismo de Protección Civil.

PATRIMONIO EN RIESGO
Los incendios no solo han puesto en peligro a la población, sino también al patrimonio. El fuego que ha afectado al paraje natural de Las Médulas, declarado Patrimonio de la Humanidad, podría tener graves consecuencias para la conservación de los canales romanos. La pérdida de vegetación y el «choque térmico» en las pizarras podrían alterar irreversiblemente la infraestructura, dejando al descubierto un legado histórico que ha sobrevivido durante dos milenios.
La Universidad de León (ULE), a través de su grupo de investigación GeoInca, ha ofrecido su ayuda para evaluar los daños y establecer un plan de gestión que permita salvar este valioso enclave. La situación es crítica y, según los expertos, la magnitud real de los daños dependerá de las medidas que se implementen a corto y medio plazo para proteger los canales de la erosión y otros factores.
La investigación y la colaboración son cruciales en estos momentos para evitar que el fuego de este verano se lleve por delante, además de vidas, uno de los tesoros más preciados de la historia de España.
