¿Te han cobrado comisión por sacar tu pensión en ventanilla? El Banco de España ha lanzado una advertencia que te interesa, y mucho. Imagina la escena: llegas a tu sucursal de toda la vida para retirar tu dinero y, de repente, te aplican un cargo inesperado por una operación que siempre ha sido gratuita. Lo que quizá no sepas es que podrías estar ante una práctica abusiva, ya que los bancos no pueden cobrar comisiones por la retirada de efectivo de la pensión en ventanilla a clientes vulnerables con una cuenta de pago básica. ¿Eres uno de ellos? Sigue leyendo.
La situación es más común de lo que parece y genera una enorme indefensión entre los más mayores. Pero no todo está perdido, porque la normativa vigente te ampara de una forma muy clara y contundente, una protección que el supervisor bancario se encarga de recordar a las entidades para evitar abusos generalizados. Conocer tus derechos es el primer paso para defenderlos y, sobre todo, para recuperar un dinero que es tuyo y que nunca debieron haberte quitado. Te contamos cómo actuar.
¿UNA COMISIÓN ILEGAL EN TU CUENTA? LA LETRA PEQUEÑA QUE TU BANCO NO QUIERE QUE LEAS

Ir a la oficina bancaria a por la pensión es un ritual para muchas personas, un trámite que forma parte de su rutina mensual. Por eso, el impacto de una nueva comisión por este servicio es tremendo, pues esta práctica penaliza especialmente a las personas con más dificultades de acceso a la banca digital. Lo que se presenta como un simple cargo administrativo es, en realidad, una barrera que confirma la brecha digital y que el regulador financiero quiere atajar de raíz.
El cobro de esta comisión no es un simple detalle sin importancia. Atenta directamente contra el espíritu de la normativa de protección al cliente bancario, como ha recordado el Banco de España, ya que viola las condiciones especiales asociadas a las cuentas de pago básicas diseñadas para garantizar la inclusión financiera. Es un movimiento que, aunque pueda parecer menor, tiene un gran calado social y económico para un colectivo que merece la máxima protección por parte de las entidades.
LA LEY TE PROTEGE: ESTOS SON LOS PENSIONISTAS QUE NO DEBEN PAGAR NI UN CÉNTIMO
La protección no es universal para todos los clientes, sino que está diseñada para un perfil muy concreto. Hablamos de aquellos titulares de una «cuenta de pago básica», un producto específico que la ley ampara, pues esta protección legal se activa para pensionistas cuyos ingresos familiares no superen ciertos umbrales establecidos. Si tus ingresos son reducidos y no tienes más propiedades que tu vivienda habitual, es muy probable que te encuentres en este supuesto y tengas derecho a reclamar.
Para ser considerado cliente vulnerable no basta con ser pensionista. La normativa europea, traspuesta a la legislación española, establece unos criterios objetivos para evitar la arbitrariedad de los bancos, ya que la entidad supervisora confirma que el banco debe evaluar si el cliente cumple los requisitos de vulnerabilidad para ofrecerle esta cuenta gratuita. El Banco de España insiste en que las entidades tienen la obligación de informar activamente a los clientes que puedan beneficiarse de estas condiciones ventajosas.
LA CUENTA DE PAGO BÁSICA: EL ESCUDO SECRETO CONTRA LOS ABUSOS BANCARIOS

Quizá nunca hayas oído hablar de ella, pero la cuenta de pago básica es un derecho. Se trata de un producto que permite realizar operaciones esenciales como domiciliar recibos, hacer transferencias o sacar dinero, ya que garantiza el acceso a servicios bancarios fundamentales por una comisión máxima de tres euros al mes o incluso de forma gratuita. Esta herramienta, impulsada por la autoridad monetaria, es un salvavidas para quienes tienen dificultades para afrontar los costes de la banca tradicional.
Lo más importante es que las entidades no pueden negarse a abrirte una si cumples los requisitos. No es un favor que te hacen, sino una obligación legal que deben cumplir rigurosamente, porque todos los bancos que ofrecen cuentas corrientes a consumidores están obligados por ley a disponer de estas cuentas de pago básicas en su catálogo. El Banco de España vigila de cerca que esta obligación se cumpla y no se pongan trabas a los solicitantes que tienen derecho a ella.
PASO A PASO: ASÍ SE RECLAMA EL DINERO QUE TE HAN COBRADO DE MÁS
El primer impulso puede ser discutir con el empleado de la sucursal, pero no es el camino más efectivo. Lo primero y fundamental es formalizar tu queja por escrito, ya que debes dirigirte al Servicio de Atención al Cliente o al Defensor del Cliente de tu propio banco. Este paso es imprescindible y tienes que guardar una copia sellada de tu escrito o el acuse de recibo si lo haces por vía telemática para tener una prueba.
Una vez presentada la reclamación, el banco tiene un plazo legal para darte una contestación. La paciencia es clave, pero no infinita, pues la entidad financiera dispone de un plazo máximo de un mes para responder a tu queja de forma motivada. Si en ese tiempo no has recibido noticias o la respuesta es negativa y sigues creyendo que tienes razón, se abre la siguiente vía, la que te lleva directamente al Banco de España.
EL BANCO DE ESPAÑA TOMA CARTAS EN EL ASUNTO: QUÉ HACER SI NO TE HACEN CASO

Si la respuesta de tu entidad no te satisface o ni siquiera se han dignado a contestarte, es hora de pasar al siguiente nivel. Puedes y debes presentar una reclamación ante el Departamento de Conducta de Entidades, ya que el organismo regulador analizará tu caso y emitirá un informe motivado sobre si el banco ha incumplido la normativa. Aunque su decisión no es vinculante como una sentencia judicial, la gran mayoría de los bancos acaban rectificando por el peso reputacional que supone.
En definitiva, no estás solo frente a los posibles abusos de la banca. Conocer la existencia de la cuenta de pago básica y los mecanismos de reclamación es tu mejor defensa, pues ejercer tus derechos como consumidor no solo te permite recuperar tu dinero, sino que también contribuye a que las entidades cumplan la ley. El Banco de España pone a tu disposición las herramientas; usarlas para defender lo que es justo está en tu mano y es más sencillo de lo que imaginas.