La ola de incendios que está arrasando España ha puesto en el ojo del huracán la capacidad de respuesta del Gobierno central ante las emergencias, según indica el Partido Popular (PP), tras los tensos días que se están viviendo por estos incidentes. Una situación que está poniendo en jaque el modelo preventivo y en entredicho la tan manida Ley de Montes, que esta demostrando ser un fracaso tras este verano.
En este sentido, Antonio Sanz, coordinador de Interior y Emergencias del PP, ha alzado la voz para denunciar una gestión que califica de «lamentable», asegurando que las comunidades autónomas afectadas por los devastadores fuegos apenas han recibido los medios reclamados al Ejecutivo. La crítica es contundente: «No hemos tenido un Gobierno a la altura de las circunstancias ni a la altura del nivel de emergencia», ha sentenciado Sanz, reprochando al presidente Pedro Sánchez su presunta falta de ayuda y la persistente necesidad de más recursos para sofocar los incendios que aún asolan el territorio.
La situación es, a juicio del PP, insostenible. Sanz ha hecho un balance sombrío de la asistencia gubernamental, detallando un panorama de inacción y retrasos. «Han sido cinco días en los que ha habido que pedir la actuación de las Fuerzas Armadas y la mayoría de lo que se ha pedido todavía no ha llegado», explicó el coordinador popular, evidenciando una desconexión entre las promesas y la realidad sobre el terreno.

EXIGENCIA DE FEIJÓO
El relato del Partido Popular contrasta fuertemente con la versión oficial ofrecida por el Ministerio del Interior. Según Sanz, hace apenas unos días, desde el departamento que dirige Fernando Grande-Marlaska se aseguraba que todos los medios disponibles eran suficientes para afrontar la situación. Sin embargo, la realidad, argumenta Sanz, ha desmentido esta afirmación. «Se demostró claramente que no era verdad porque, después de que lo pidiera Alberto Núñez Feijóo, se incorporaron más medios logísticos de las Fuerzas Armadas a la extinción de los incendios», reveló, señalando una supuesta rectificación tardía y forzada por la presión de la oposición.
La demora no solo se circunscribe a los recursos nacionales. Sanz también ha cargado contra el Gobierno por la tardanza en la solicitud de ayuda europea. Tras más de dos semanas de incendios persistentes, y después de que el líder del PP, Núñez Feijóo, exigiera al Gobierno que pidiera recursos a Bruselas, es «ahora cuando están llegando a las comunidades autónomas», ha lamentado el dirigente popular, subrayando la falta de previsión y agilidad en la gestión de una emergencia de tal magnitud.
PACTOS VACÍOS Y UNA LEALTAD A LA CARTA
La respuesta del Gobierno a la crisis de los incendios no ha estado exenta de retórica política. El presidente Sánchez ha propuesto un pacto de Estado para la prevención y extinción de incendios, una iniciativa que Sanz ha calificado de «anuncio» y no de solución. «Todavía queda mucho para terminar de extinguir los incendios, no es momento de anuncios ni de fotos, son momentos de aportar el máximo de medios posibles», replicó Sanz, recordándole al presidente que el mismo pacto fue anunciado hace ya tres años sin que se haya materializado en medidas concretas que sirvan para apagar los fuegos activos.

La petición de lealtad por parte de Sánchez hacia las comunidades autónomas y la oposición también ha sido objeto de crítica por parte del PP. «Hubiera sido deseable que esa lealtad fuese desde el principio y que no haya que esperar a que el Gobierno salga de vacaciones para que se ofrezca una respuesta de medios a las comunidades autónomas», espetó Sanz, sugiriendo que la disposición a colaborar del Ejecutivo llega tarde y con un marcado tinte electoralista.
Sanz fue más allá, extendiendo la exigencia de lealtad a los miembros del propio Gabinete. «Lealtad tiene que ser de todos, no vale que lo diga el presidente del Gobierno y haya ministros que están dedicados a hacer oposición a las comunidades autónomas y ministros que están dedicados al chascarrillo y las bromas con los incendios», añadió, en una clara alusión a comentarios que, a juicio del PP, han minimizado la gravedad de la situación y el sufrimiento de los afectados.
EL PLAN DE PROTECCIÓN CIVIL EN EL LIMBO
Más allá de la respuesta inmediata a los incendios, el PP ha puesto el foco en las deficiencias estructurales en la política de protección civil del Gobierno. Sanz recordó que, hace un lustro, con la aprobación del Plan Estatal de Protección Civil, la Administración del Estado quedó obligada a activar el Mecanismo Nacional de Respuesta en Protección Civil. Sin embargo, el Consejo Nacional de Protección Civil, que depende directamente del Gobierno, no ha cumplido con esta obligación.
Además, el Ejecutivo tampoco ha aprobado el mapa nacional de recursos y medios entre el Estado y las comunidades autónomas. «Un catálogo de recursos con los que, de manera automática, se hubiera podido contar para responder a la urgencia de las emergencias», apuntó Sanz. Para el PP, esta inacción es una muestra clara del «déficit y del abandono con el que el Gobierno de Sánchez ha tratado a la protección civil». El Gobierno, advirtió Sanz, «tiene la obligación de conocer qué medios dispone cada comunidad autónoma y qué medios dispone el Estado para aportarlos». El hecho de no manejar esos datos es, a su juicio, una prueba irrefutable de la negligencia.
Finalmente, Antonio Sanz calificó de «lamentable» el intento de la vicepresidenta Montero de provocar un conflicto de competencias, vinculándolo a un claro intento de «ocultar los errores del Gobierno». «Solo cabe interpretar así esas declaraciones porque todo el mundo sabe que en una situación operativa de nivel 2 no hay debate de competencias, hay suma de esfuerzo de medios, de materiales y personal a disposición de la dirección de la emergencia», sentenció Sanz, dejando claro que, para el Partido Popular, la prioridad en estos momentos debe ser socorrer, ayudar y garantizar la seguridad de la ciudadanía, sin escatimar esfuerzos ni caer en improvisaciones.