Un fanático de ‘Cuéntame’ descubre un error garrafal en la boda de Inés que lleva 20 años a la vista de todos

• El fallo, que ha pasado desapercibido durante 20 años, ha generado un intenso debate en redes sociales entre los seguidores de la serie.
• El gazapo se debe a un error de raccord, un despiste común en rodajes largos que no resta valor a la mítica ficción de TVE.

La magia de Cuéntame reside en su capacidad para transportarnos a un pasado que sentimos como nuestro, incluso si no lo vivimos. Cada detalle, cada coche y cada canción están medidos al milímetro para construir un recuerdo colectivo casi perfecto. Pero, ¿y si esa perfección tuviera una grieta? Ahora, un detalle ha salido a la luz, un detalle que ha permanecido oculto a plena vista durante dos décadas en uno de sus capítulos más míticos.

Hay series que marcan a una generación y luego está Cuéntame, que ha marcado a varias. La hemos visto y revisto, hemos crecido con los Alcántara y sentimos San Genaro como nuestro propio barrio. Creíamos conocer cada escena de memoria, pero estábamos equivocados. Gracias a la insistencia de un seguidor, un fan con ojo de halcón ha destapado un error garrafal en uno de los momentos más icónicos que nos obliga a volver a mirar.

¿UNA SERIE INFALIBLE?

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Si por algo se ha caracterizado siempre la ficción de TVE es por su rigurosidad histórica. El equipo de producción se dejaba la piel para que el papel pintado, los electrodomésticos o la ropa fueran un reflejo fiel de cada época. Era parte de su encanto y lo que la diferenciaba de otras producciones. Por eso, el equipo de documentación y arte trabajaba con una precisión casi quirúrgica para que nada desentonara.

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Esa fama de serie meticulosa, casi obsesiva con la veracidad, es lo que ha provocado que este descubrimiento sea tan sorprendente. Dábamos por hecho que la historia de los Alcántara estaba libre de esos pequeños gazapos que tanto nos gusta encontrar en otras series. Durante años, creíamos que la producción de Ganga era a prueba de fallos de este calibre, convirtiendo este hallazgo en algo todavía más sonado.

EL MOMENTO EXACTO DEL «CRIMEN» TELEVISIVO

Todos recordamos la primera boda de Inés con el cura Eugenio. Un momento de tensión familiar, de amor prohibido y de una España que empezaba a abrirse. La cámara se centra en los rostros, en las miradas cómplices y en la emoción contenida de Antonio y Merche. Pues es justo ahí, en el clímax de la ceremonia, donde se esconde el fallo. Porque el error se encuentra en el collar de perlas que Inés lleva al altar.

La escena es un ir y venir de planos. En el plano general, cuando Inés llega junto a su padre, luce un sencillo pero elegante collar de perlas. Sin embargo, en el siguiente plano corto, justo cuando pronuncia el «sí, quiero» mirando a Eugenio, la joya ha desaparecido de su cuello. Y lo más increíble es que, en el contraplano siguiente, vuelve a tenerlo puesto. Así, el collar desaparece misteriosamente del cuello de la novia en el plano del ‘sí, quiero’.

LA REVOLUCIÓN EN LAS REDES: ¿NADIE SE DIO CUENTA?

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Todo empezó con un comentario en un foro de fans y de ahí saltó a las redes sociales, donde se convirtió en un reguero de pólvora. Lo que parecía la ocurrencia de un espectador demasiado quisquilloso se confirmó con pruebas irrefutables: capturas de pantalla y clips de vídeo que no dejaban lugar a dudas. En cuestión de horas, miles de fans han vuelto a ver la escena para comprobar el error con sus propios ojos.

La revelación ha generado un torbellino de comentarios. Desde los que se lo toman con humor hasta los que intentan buscarle una explicación lógica, como un reflejo de la luz o un cambio de ángulo. Se ha abierto un debate apasionante que ha vuelto a poner a la mítica serie en el centro de la conversación. Porque en el fondo, el debate demuestra la increíble comunidad de seguidores que la serie sigue manteniendo viva.

¿CÓMO SE CUELA UN ERROR ASÍ EN ‘CUÉNTAME’?

El culpable de este pequeño misterio tiene un nombre técnico: error de raccord o de continuidad. Ocurre cuando un elemento cambia de un plano a otro dentro de la misma secuencia, que se graba en diferentes tomas, a veces con horas de diferencia. Es la pesadilla de los equipos de rodaje. Y es que un fallo de raccord es un error de continuidad entre dos planos de una misma escena.

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La figura del script o supervisor de continuidad es la encargada de que esto no ocurra, pero en rodajes tan largos y complejos como el de una boda, con tantos actores y ángulos de cámara, un despiste es más humano de lo que parece. A pesar de los controles, hasta en las mejores familias y las mejores producciones ocurren estas cosas. Porque estos pequeños despistes son más comunes de lo que pensamos en cine y televisión.

MÁS ALLÁ DEL FALLO: LA MAGIA SIGUE INTACTA

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¿Resta este descubrimiento un ápice de calidad o de emoción a una de las mejores series de nuestra historia? En absoluto. De hecho, ocurre todo lo contrario. Este tipo de hallazgos humanizan la producción, nos recuerdan que detrás de la magia de la televisión hay un equipo de personas trabajando a contrarreloj. Al final, el cariño por los personajes y sus historias permanece completamente intacto tras este hallazgo.

Este gazapo se convierte ahora en una anécdota más, en un guiño para los verdaderos fanáticos que volverán a ver la escena con otros ojos, buscando el instante preciso del «collar fantasma». Es otra razón para seguir hablando de Cuéntame y para recordar por qué nos enamoró. Porque este gazapo es ya una anécdota más en el inmenso álbum de recuerdos que nos ha regalado la familia Alcántara.

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